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Comerciantes y hosteleros han acordado no abrir sus negocios del miércoles al viernes próximo
Alrededor de 150 personas asistieron ayer a la reunión organizada por la Asociación de Comerciantes Acsemel para debatir sobre la última medida de la Delegación del Gobierno: la limitación del comercio atípico en Beni Enzar de 7:00 a 11:00 horas. Fueron muchas las intervenciones de empresarios del sector servicios de la ciudad en este encuentro, ya que acudieron hosteleros y transportistas entre otros, que mostraron su descontento con esta iniciativa adoptada en la frontera. La conclusión, tras un intenso debate, fue que desde el miércoles hasta el viernes cerrarán todo sus negocios.
El presidente de Acsemel, Abdeslam Mohamed, explicó ayer a El Faro que las previsiones de asistencia a esta reunión era de unos 50 empresarios, pero se triplicó esta cifra e incluso hubo personas que no pudieron entrar en el salón reservado para este encuentro.
Mohamed destacó que asistieron miembros de todos los sectores, desde el transporte a la hostelería o la navieras. Aseveró que todos levantaron la mano cuando se decidió aportar la primera medida de protesta: el cierre de negocios.
El presidente de esta entidad argumentó que es una forma de presionar a la Administración central y local para que vean que tienen que contar con ellos a la hora de tomar decisiones que afectan a sus empresas. Aseveró que el único objetivo que tienen es proteger sus negocios para seguir trabajando.
Clausurar empresas
Mohamed resaltó que los Gobiernos central y local no paran de “poner palos en las ruedas” y no saben el porqué de esta actitud. Se preguntó si es que la Ciudad y la Delegación desean que cierren todas estas empresas, muchas de ellas con decenas de años y que pretenden ser el futuro de los hijos de los propietarios, añadió.
El presidente de Acsemel subrayó que reducir el paso del comercio fronterizo es igual a cerrar sus negocios. Y advirtió de que no sólo las tiendas cercanas a Beni Enzar o Farhana estarán afectadas, sino muchas otras empresas porque “forman una cadena”.
En este sentido, comentó que si cierran estos comercios, habrá menos contratación de camiones, también se reducirá el trabajo de muchas asesorías, el de las navieras y finalmente llegará esta crisis a las tiendas del centro.
Más vías de negociación
Mohamed también indicó que entiende que las autoridades deseen dejar Beni Enzar para el paso de turistas y ciudadanos. La llegada de marroquíes de clase media a la ciudad para hacer compras y disfrutar de la hostelería será bueno para Melilla, afirmó. Pero exige una compensación para que sus empresas no se vean afectadas por esta limitación.
Solicitó un incremento de horas de funcionamiento de los pasos de Farhana y Barrio Chino para transportar mercancías a Marruecos.
El presidente de Acsemel insistió en que hay otras vías que se pueden negociar para que ningún sector se vea perjudicado.