El lehendakari, Iñigo Urkullu, afirmó ayer que la inhumación de los restos del general José Sanjurjo en Melilla, celebrado en un “contexto de homenaje al general golpista”, contraviene el espíritu de la Ley de Memoria Histórica y constituye una “presunta apología y exaltación de la dictadura franquista”. Esta fue su respuesta a la pregunta de la parlamentaria de EH Bildu, Maddalen Iriarte, en el pleno de control celebrado en la Cámara vasca.
Los restos del general golpista fueron exhumados en aplicación de la Ley de Memoria Histórica en noviembre del Monumento a los Caídos de Pamplona donde reposaron durante décadas y fueron enterrados el 23 de marzo en un panteón en Melilla. En la ceremonia participaron autoridades militares y civiles, como el presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda (PP).