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Los padres de los dos jóvenes dicen que les tocaría la lotería de tener noticias de ese suceso
Las familias de Emin y Pisly se concentraron de nuevo ayer para exigir justicia para estos dos jóvenes que fueron tiroteados por la Marina Real de Marruecos en 2013. Se cumplen 38 meses sin ellos y los padres de ambos aseveraron que no quieren que se genere un conflicto con el país vecino, sino respuestas a sus preguntas. “Al espíritu de la Navidad le pedimos que invada a los que tienen cartas en este asunto para que muevan el culo y nos digan qué les paso a nuestros hijos”, aseguró ayer el padre de Pisly, Abdeslam Ahmed.
Destacó que les tocaría la lotería si se les contara qué ocurrió ese día 27 en aguas marroquíes a los dos melillenses.
Ahmed subrayó que son unos días duros para ellos porque recuerdan cómo se celebraban estas fiestas en sus hogares. Afirmó que viven en una ciudad donde las tradiciones de otras religiones son como propias y se reunían para cenar juntos en su casa. De hecho, Pisly salía con sus amigos también en Nochevieja con su traje de chaqueta para celebrar el Año Nuevo.
Sin embargo, siguen sin tener una razón de la muerte de sus hijos y un año más estarán sin ellos en estas fechas importantes y de las que tienen muchos recuerdos.
“Descansar”
Por su parte, el padre de Emin Dris Mohamed afirmó que lo único que piden al Gobierno central y a Marruecos es que les expliquen qué ocurrió ese día. Aseveró que aguantan un dolor muy fuerte en sus casa y sólo necesitan respuestas para poder “descansar” y seguir con sus vidas.
Resaltó que no quieren venganza ni un conflicto entre los Ejecutivos marroquíes y españoles, sino saber cómo se sucedieron los hechos que llevaron a sus hijos hasta la muerte.
No obstante, Mohamed comentó que tiene dudas de que el Gobierno español haya preguntado a Marruecos por este suceso. Aseveró que el país alauita ya habría dado algún tipo de respuesta. Lamentó que los políticos no hayan hecho nada por sus familias. De hecho, apuntó que los melillenses le dicen que las autoridades son “unos sinvergüenzas” porque no les han dado ninguna información sobre cómo murieron sus hijos.
El padre de Emin insistió en que si estos dos jóvenes hubieran tenido otro apellido, sus familia seguirían esperando una respuesta a sus preguntas.