La Guardia Civil encontró ayer lunes en el puerto de Melilla 38 kilos de hachís ocultos en los dobles fondos de un coche que pretendía embarcarse a Málaga. En el vehículo, un Volkswagen Caddy de matrícula española, sólo viajaba un hombre, que fue detenido.
La actuación tuvo lugar sobre las 8:30 horas en la inspección previa al embarque. Tras marcar el perro detector de estupefacientes indicios de droga oculta, los agentes localizaron dos dobles fondos, uno bajo los asientos delanteros y otro bajo las faldillas laterales del vehículo. La droga estaba repartida en 59 paquetes.
El conductor, de 34 años y nacionalidad marroquí, tiene fijada su residencia en la provincia de Almería.