El presidente dice que las mafias aprovechan la situación, aunque el delegado no da este argumento por sentado.
Un total de 37 de inmigrantes saltó ayer la valla de Melilla alrededor de las 6:30 horas por la zona de Villa Pilar. Lo intentaron 120, pero la intervención de las Fuerzas de Seguridad españolas y marroquíes sirvieron para evitar que todos pasaran.
El salto coincidió con la celebración de la jornada electoral y se produjo un par de horas antes de la apertura de los colegios. Hay que recordar que un total de 573 agentes de Policía Local, Nacional y Guardia Civil estaban encargados ayer de velar por la seguridad de la jornada electoral.
En este sentido, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, analizó el hecho de que la entrada coincidiera con el día de las votaciones. Imbroda consideró que las mafias aprovechan en muchas ocasiones “momentos de debilidad” en la frontera. Aseguró que no es la primera vez que ocurre algo así. De hecho, momentos como las horas de ruptura del ayuno en Ramadán o Nochevieja suelen ser sensibles en la valla.
No obstante, el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, dijo que “hay argumentos para defender esa teoría como la contraria”. El Barkani aseguró que mientras haya inmigrantes al otro lado con la esperanza de intentar pasar algún día se seguirán produciendo intentos de salto “hoy, ayer o mañana”.
El delegado del Gobierno recordó, asimismo, que en los últimos tiempos la presión más importante ha estado en Ceuta, donde no dejan de producirse saltos.
El Barkani explicó que ninguno de los subsaharianos que trató de saltar se quedó encaramado en la verja porque la intervención de los agentes fue rápida.
Según indicó EFE, numerosos residentes del Centro salieron a recibir a los subsaharianos, algunos de ellos heridos que han pasado a ser atendidos en la enfermería y para ayudar a los que aún se encuentran por los alrededores desorientados.
La Guardia Civil mantuvo varias horas un fuerte despliegue de seguridad en las inmediaciones del CETI, aunquea a mediodía ya se empezó a permitir la circulación de vehículos por la carretera de circunvalación que discurre junto a la valla, cuyos accesos a la zona donde se ha producido el salto han estado cerrados al tráfico.
Ocupación CETI
El delegado indicó que actualmente en el CETI hay 550 inmigrantes, una ocupación que consideró “aceptable”. Indicó que continúan realizando traslados semanales a la península.
El último salto se produjo en Melilla el pasado 26 de mayo cuando un inmigrante subsahariano, de los casi 120 que protagonizaron el intento de salto a la valla de Melilla, consiguió llegar al CETI, después de que 30 de ellos lograran encaramarse durante un tiempo al vallado.