El vicepresidente del Gobierno asegura que está tranquilo porque no tiene ninguna duda de que todo es legal.
“No sabemos qué intereses hay detrás de la intención de CpM de restar autogobierno a Melilla”. Así respondió ayer el vicepresidente primero de la Ciudad, Manuel Ángel Quevedo, al líder de CpM, Mustafa Aberchán, después de que éste pusiera en duda la legalidad de que Quevedo, diputado no electo, esté ostentando el puesto de vicepresidente. Quevedo aseguró que las conclusiones del cepemista son “erróneas”. “Nosotros estamos muy tranquilos, somos un Gobierno muy legalista, mucho más que CpM. No quiero recordar las actuaciones de los cepemistas que no han sido conforme a la legalidad”, indicó el vicepresidente primero de la Ciudad y consejero de Medio Ambiente. El popular aseguró que no tienen ni la más mínima duda sobre su situación actual en el Gobierno y recalcó que “todas las sentencias emitidas por todos los tribunales” los avalan en el mismo sentido, al contrario de lo que indicó horas antes en una rueda de prensa Mustafa Aberchán. “Contamos con el informe de legalidad como ya hemos dicho alguna vez. Tanto el director general de Presidencia, jurista jefe del Tribunal de Desarrollo Económico, como el secretario general de la Asamblea, indican claramente la corrección absoluta de que el vicepresidente del Gobierno pueda ser un diputado no electo”, apostilló Quevedo, que apuntó que una cuestión distinta es la que se refiere a la Vicepresidencia de la Asamblea, un puesto que actualmente ocupa Cristina Rivas. Quevedo hizo referencia a que tanto Melilla como Ceuta, como ciudades autónomas, cuentan con una potestad de autogobierno y autoorganización diferente a las administraciones locales. “Nos extraña que CpM esté en este momento entrando en este asunto. Quizás pueda haber factores externos”, apostilló. El consejero de Medio Ambiente dijo, además, que cuando el propio Mustafa Aberchán fue presidente de la Ciudad tuvo un consejero no electo. Hay señalar en este punto, que Aberchán también dijo en su comparecencia ante los medios de comunicación que esta práctica, en referencia a que un cargo no electo ocupe un cargo de consejero, ha sido habitual en Melilla desde tiempos de Ignacio Velázquez. Quevedo insistió en que no entiende que intereses hay detrás de querer restar autogobierno a Melilla, algo que consideró que no sería beneficioso para la ciudad. “La Ciudad tienen más posibilidades de autogobierno que un ente local. Lo dice el Tribunal Constitucional y el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, pero CpM quiere limitarlo. Cuando él (Aberchán) era presidente no quería”, recalcó con vicepresidente primero del Ejecutivo local. El consejero de Medio Ambiente aseguró que la próxima semana se remitirá a los cepemistas un extenso y claro informe en el que se les explicará con precisión todo lo referente a esta cuestión. En cualquier caso, Quevedo recalcó que está muy tranquilo porque no tiene ningún tipo de duda sobre la legalidad de su situación. Además, el vicepresidente del Gobierno recordó que el Ejecutivo ya respondió a los cepemistas en pleno a una cuestión relativa a este asunto. En cualquier caso, insistió en que se les facilitará una información más extensa en la que se demuestra que las actuaciones realizadas en el nombramiento de Quevedo como vicepresidente están dentro del marco legal, al contrario de lo que cree Aberchán.
El vicepresidente que sustituye al presidente en funciones no es alcalde
El vicepresidente primero del Gobierno, Manuel Ángel Quevedo, explicó ayer al presidente de CpM, Mustafa Aberchán, que es absolutamente erróneo considerar que un vicepresidente se convierta en alcalde. “Un viceconsejero cuando el consejero de su área no está no se transforma en consejero sino que realiza sus funciones de forma excepcional. Lo mismo ocurre si el presidente no puede acudir al Consejo de Gobierno y en su lugar va el vicepresidente, que realiza sus funciones. Solamente eso”, precisó. Hay que señalar que Aberchán pidió que Quevedo se abstuviera de presidir ningún Consejo de Gobierno porque al no ser un diputado electo los acuerdos adoptados en estas reuniones del Ejecutivo podrían ser declarados nulos por un tribunal, en el caso de que el asunto llegara a los juzgados.