Las actuaciones de 'Salander' se dividen en 3 etapas. Si bien al principio parecía haber relación entre el perfil y PPL, en el último periodo se dedica a atacar a la formación
Las aportaciones del perfil 'Lisbeth Salander' en las redes sociales “casi en su totalidad presentan un cariz político en su temática, concretamente con el claro propósito de desprestigiar al Gobierno de la Ciudad Autónoma”. Así se extrae del informe judicial de la Operación Montecristo’ al que ha tenido acceso El Faro. En el documento se indica que en estas aportaciones no dudaron en hacer públicos “hechos concernientes a la vida personal” de los representantes del Ejecutivo local, así como difundir documentación oficial.
No obstante, en el informe se precisa que no sólo el Gobierno fue objeto de las críticas hechas desde el perfil de 'Lisbeth Salander' y apunta a la existencia de tres etapas diferenciadas. La primera, con la que comienza la actividad del citado perfil está relacionada con la denuncia de una serie de hechos supuestamente acaecidos en el Centro Gámez Morón. 'Salander' difundió publicaciones que arremetían contra los responsables máximos del centro y contra la figura política relacionada con el mismo. En este momento la entonces consejera de Bienestar Social, María Antonia Garbín es una de las atacadas por estas informaciones. En las redes sociales se acusó a dos personas despedidas de este centro de filtrar documentación al pseudónimo. Se trata de Fran C. y T.V.
Del amor al odio
En la segunda etapa , siempre según el documento de la investigación, el pseudónimo 'Lisbeth Salander' “despliega una estrategia destructiva contra todo estamento público relacionado al Gobierno de la ciudad, coincidiendo curiosamente con la afiliación de F. C. y T.V. a una formación política de la oposición (PPL), quedando patente la relación directa y claros intereses existentes entre las agresivas publicaciones y los mencionados”. Otras dos personas afiliadas al mismo partido, Mª Nieves V. e Isabel S., son señaladas de colaborar “activa y necesariamente” con 'Lisbeth Salander'. Una tercera persona, Félix G.al que consideran relacionado con la trama también pasó a formar parte del censo de afiliados de PPL. Más adelante, otras dos personas afiliadas al partido, un policía y nacional y su mujer también aparece en la investigación relacionadas con los hechos.
La tercera etapa, surge a raíz de las discrepancias surgidas entre los cinco primeros detenidos (Nieves V., Isabel S., Fran C. y su esposa y Félix G.) y las direcciones de la formación política (PPL), coincidiendo con la celebración de las elecciones europeas. Cuatro de los cinco investigados en aquel momento se dieron de baja del partido. A partir de ese momento desde el perfil de 'Lisbeth Salander' comienzan a realizarse publicaciones “de cariz destructivo” dirigidas contra PPL. Estas enemistades darían origen a la publicación de identidades, colaboraciones y relaciones directas entre el pseudónimo, sus supuestos gestores y los ofendidos en sus publicaciones lo que sirvió como línea de investigación para esclarecer los hechos.
Fotos del presidente con su familia, entre el material
Entre el numeroso material recogido en los siete tomos de la investigación del ‘Caso Montecristo’ llaman la atención, además de las conversaciones entre los implicados y el perfil del pseudónimo 'Lisbeth Salander', las fotografías encontradas en los móviles de algunas de las personas investigadas como supuesta parte de la trama. Tanto en el móvil de María Nieves V. como el de Félix G.se encontraron fotografías de rostros muy conocidos de la política local. Imágenes del presidente Juan José Imbroda, su esposa, Francisca Conde, el viceconsejero de Turismo, Javier Mateo y su esposa, entre otros estaban en el móvil de Juan Félix. Algunas de ellas fueron usadas para “nutrir las publicaciones” del pseudónimo 'Lisbeth Salander'. En el caso de María Nieves había fotografías también del presidente paseando con su esposa por la playa o en compañía de su familia en El Pueblo, del ex consejero de Fomento Miguel Marín, el ex viceconsejero de Medio Ambiente, Ramón Gavilán o el viceconsejero de Turismo Javier Mateo. Las imágenes fueron tomadas desde un vehículo. Algunas de ellas, en concreto la de Ramón Gavilán, desde un Golf rojo, conducido habitualmente por otra de las imputadas, Isabel S.