La madrugada de ayer fue movida en el perímetro fronterizo de Melilla. Unos cien inmigrantes de origen subsahariano fueron avistados aproximándose a la valla de Melilla en dos ocasiones, una a las 23:00 horas de la noche y otra a las 6:00 horas de la mañana.
En ambos acercamientos, y gracias a la intervención coordinada de la Guardia Civil y la Policía marroquí, fueron disuadidas las intentonas. Desde el primer avistamiento de salto a la valla, además, se puso en funcionamiento el helicóptero de vigilancia fronteriza de la Benemérita, que estuvo sobrevolando la alambrada durante toda la noche de ayer.
Fuentes del Instituto Armado relatan que a las 23:00 horas de ayer observaron a un grupo numeroso de personas, un centenar aproximadamente, en la zona colindante a la valla, aproximándose a ella. Al ver a los efectivos de la Guardia Civil, dicho grupo retrocedió para guarecerse en los bosques de la zona.
Segunda tentativa
Según esta misma institución, puede que fuese este mismo conjunto de personas el que acometió una segunda tentativa sobre las 6:00 de la mañana de ayer por la zona fronteriza cercana al Río de Oro. En esta ocasión, diez de los inmigrantes lograron encaramarse al vallado fronterizo, pero tras la rápida actuación de las Fuerzas de Seguridad del Estado cambiaron de idea, retornando a territorio marroquí.
Según fuentes de una ONG instalada en Marruecos, las redadas se intensificaron en las inmediaciones de la alambrada a lo largo de la noche. Los ‘mejanis’ recrudecieron sus actuaciones tras la bajada de los inmigrantes de la valla de Melilla..
La organización no gubernamental denuncia “una excesiva brutalidad” en las formas de los policías marroquíes, ya que en las batidas realizadas por los bosques colindantes al perímetro fronterizo, algunos de los subsharianos resultaron heridos por causa de su “actuación desmedida”.