Josep Pàmies, conocido crítico de la medicina convencional, llena el salón de actos de la UNED.
El conocido horticultor y escritor Josep Pàmies afirmó ayer en su visita a Melilla que “si la quimioterapia fuera tan efectiva, no habría cien mil muertos por cáncer al año en España”.
Pàmies pronunció en la UNED la conferencia ‘Dulce revolución de las plantas medicinales y las terapias de bajo coste’ ante un auditorio que llenó el salón de actos de ese centro docente.
El conferenciante es conocido por polémicas como haber propuesto a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el uso de plantas medicinales para curar la malaria, así como para prevenir los efectos del ébola. Aparte, es un enemigo declarado de los alimentos transgénicos, como declaró a El Faro en una entrevista publicada ayer por este diario.
Pàmies dedicó un largo espacio de su intervención ayer en Melilla a analizar la situación de la enfermedad del cáncer en España. Entre sus principales causas citó “la mala alimentación” y el “estrés”.
El horticultor, cuyas polémicas han causado que se hayan vetado sus conferencias en distintos lugares de nuestro país, aseguró que los médicos no informan a los pacientes correctamente sobre esa enfermedad. Asimismo, criticó la aplicación del “efecto nocebo”, es decir, crear en el enfermo una sensación de desánimo sobre la cura de la enfermedad, lo que es contrario al “efecto placebo”.
“¿Quiénes son los médicos para decir que te queda un mes o un año de vida? Ellos no lo saben”, afirmó el conferenciante.
Azúcar refinado
Pàmies se mostró muy crítico con el “azúcar refinado”, al que definió como “el principal veneno de la alimentación actual” y “más adictivo que la coca”. Por ello, invitó al público a no tomarlo y a consumir en su lugar azúcar moreno.
El horticultor añadió que el azúcar “va 25 veces más a una célula con cáncer que a una célula sana. ¿Por qué no se informa a los enfermos de eso?”, preguntó, y criticó que en lugar de hacer eso, se dé quimioterapia a los afectados.
Entre el público que asistió al acto, que se dividió en hora y media de conferencia y un espacio similar de tiempo para el turno de preguntas, había muchas personas que sentían “curiosidad” por las propuestas de Pàmies sobre el uso de las infusiones como medios para curar y prevenir enfermedades.