El Comité de Empresa del centro Gámez Morón ha denunciado en numerosas ocasiones las “malas” condiciones de trabajo de los empleados y que no se tomaba ninguna decisión sobre cómo actuar cuando uno de los trabajadores era agredido por algún usuario.
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aseguró ayer que para él “son importantes tanto trabajadores como los internos del centro” y por ello, apuntó que se va a escuchar a los empleados. No obstante, señaló que hay una nueva empresa al cargo del Gámez Morón, Clece, que está organizando un gran número de actividades.
Ventura resaltó que los trabajadores también deben tener en cuenta que el Gámez Morón es un centro para personas con grades necesidades de apoyo y que en “un determinado momento pueden tener un comportamiento disruptivo fuera de lo normal”. Asimismo, apuntó que es muy importante que estos empleados estén formados y estén preparados para atender a estas personas que son grandes dependientes. Aunque añadió que si un usuario tiene grades dificultades, puede ser atendido en otro centro de mayor especialización.