El secretario general de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME), Jerónimo Pérez, resaltó ayer que la bajada del paro registrada en la ciudad en mayo, tanto mensual como interanual, es una buena noticia para la economía local. Pérez recalcó que los datos apuntan a que en la ciudad se ha dejado de destruir empleo y resaltó que en lo que va de año el paro se ha reducido en más de 600 personas.
No obstante, el secretario general de la CEME advirtió de que hay que ser cautos a la hora de analizar estas cifras. Pérez aseguró que los empresarios locales aún lo están pasando mal y dijo que si bien es cierto que ya no se destruye empleo, también lo es que no se está creando trabajo a un ritmo importante. El representante de los empresarios locales insistió en que la economía no termina de arrancar. “Intentamos ser optimistas, pero es complicado después de cinco años tan difíciles”, dijo Pérez, que señaló que mientras que no se reactive el consumo y haya más acceso al crédito, será difícil que la economía melillenses avance a una velocidad más rápida.
En cualquier caso, el secretario general de la CEME señaló que los datos dados a conocer ayer por la responsable del SEPE, Esther Azancot, invitan a la esperanza y al optimismo. Resaltó la importancia de que se haya reducido el número de parados menores de 25 años y destacó el hecho de que haya habido aumentos en los datos de afiliación a la Seguridad Social, tanto en el Régimen General como en el de Autónomos.
El único dato que no terminó de gustarle a Pérez fue que el descenso del paro en el sector de la construcción haya sido sólo de cuatro personas. Indicó que es necesario que un sector económico con tanto peso genere empleo a un ritmo más rápido.