El Boletín Oficial de Melilla (BOME) publicó ayer un convenio específico entre la Ciudad y el Ministerio del Interior para la reinserción de personas exdrogadictas. Para este proyecto se cuenta con un presupuesto de 86.000 euros.
El objetivo de esta iniciativa es poner en marcha el Programa de Inserción Socio Educativo Laboral (PISEL) por parte de la Consejería de Presidencia y Salud Pública.
El acuerdo está firmado con el Ministerio del Interior a través de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Este convenio se firmó en el 1999 y desde entonces se cuenta con una subvención del Estado. De hecho, los 86.000 euros son de créditos de fondos de bienes decomisados por tráfico de drogas y otros delitos relacionados.
En las bases publicadas por el BOME se aclara que durante el primer trimestre del año la Consejería remitirá a la mesa de coordinación de adjudicaciones un informe final y de evaluación del desarrollo de los programas y una certificación detallada y pormenorizada del gasto efectuado.
No obstante, se recoge en este escrito que en la actualidad la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y la mesa de coordinación están adscritas al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. En la Ciudad es Presidencia y no Bienestar Social quien lleva el proyecto.