La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío celebró ayer su tradicional besapié.
La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío de Melilla celebró ayer su última jornada de Triduo, es decir, tres días en los que la agrupación se prepara de cara a los melillenses para la Semana Santa. El broche de la jornada llegó con una eucaristía que se celebró en la parroquia de Santa María Micaela, a la que acudieron numerosos melillenses y que terminó con la imposición del Cautivo de Oro, una distinción de la congregación a una persona por su labor social y desinteresada.
Este año el homenaje ha sido para María del Carmen Chaparro, presidenta de la Conferencia Virgen de la Luz de San Vicente de Paúl, que gestiona la entidad Proyecto Hombre en la ciudad autónoma. La entrega de este galardón corrió a cargo de Gregorio Castillo, presidente de la Agrupación de Cofradías de Melilla.
Besapié
Además de hacer entrega a Chaparro del Cautivo de Oro, máxima distinción de la Cofradía de Jesús Cautivo, la jornada de ayer fue especial para la congregación, puesto que se trató del último día de Triduo, tres días de eventos especiales para la agrupación, que han servido para dar los últimos pasos en los preparativos de cara a la Semana Santa. En concreto, ayer, la parroquia de Santa María Micaela acogió el besapié de la cofradía del Cautivo, que tuvo como protagonista a la imagen de Cristo que paseará el próximo Jueves Santo por las calles de la ciudad autónoma.
Numerosos melillenses se acercaron a la iglesia a lo largo del día para celebrar una tradición que se remonta años atrás. Los devotos de este Cristo realizan un ritual para hacer sus peticiones. En primer lugar, arrojan tres monedas a un cesto, que suelen ser mismo tamaño. A continuación realizan su petición y, acto seguido, besan los pies de la imagen para transmitir su esperanza al Cristo. Esta tradición se realiza sólo en estas fechas, con motivo de la cercanía de la Semana Santa.
Otros actos
A lo largo de las dos primeras jornadas de Triduo, la cofradía llevó también a cabo diferentes actos, como la bendición de la imagen del Cautivo y de la túnica. Además, la congregación organizó un concierto de la banda de música de la cofradía, que sirvió también como ensayo de cara al desfile de Semana Santa.
El trono de Jesús Cautivo recorrerá las calles de Melilla el Jueves Santo, fecha en el que, como viene siendo habitual desde hace 15 años, se libera un preso del centro penitenciario de la ciudad autónoma, que la cofradía se encargará de reinsertar en la sociedad. Además del Cristo, el mismo día paseará por la localidad el trono de María Santísima del Rocío, que acompaña al Cristo durante su recorrido.