Critican que prime la devolución del inmigrante a Marruecos a la seguridad de los guardias civiles
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) insistió ayer en que no se puede permitir que las agresiones a los agentes en la valla queden impunes. En declaraciones a El Faro, los responsables de la AUGC apuntaron que lo que ocurrió ayer en la alambrada, cuando un inmigrante hirió a un guardia civil con uno garfio no es algo excepcional. “Cada vez que hay un intento de salto hay agresiones. Unas veces son más graves y otras menos, pero siempre se producen”, recalcaron.
Desde la Asociación Unificada explicaron que es habitual que los subsaharianos que tratan de entrar en nuestra ciudad saltando la valla usen los utensilios caseros que ellos mismos fabrican para trepar la verja, contra los agentes. “Nosotros somos el último obstáculo para conseguir su objetivo y ellos tratan de lograrlo como sean”, aseguraron.
En este punto, aunque reconocieron que la herida que sufrió ayer el agente en la valla no fue muy grave, indicaron que la situación es insostenible. “No puede ser que prime la devolución del inmigrante a la protección de los agentes. Hay que cambiar eso”, insistieron.
Los responsables de la AUGC precisaron que la agresión al guardia civil se produjo en la zona de entrevallas y aseguraron que el inmigrante fue devuelto a Marruecos. En este punto, indicaron que no entienden que cuando el agresor es un inmigrante en la valla no se siga el procedimiento habitual, que sería la detención de esa persona y su puesta a disposición judicial.
“Hay quien habla de que esto podría provocar un efecto llamada. Es decir, que todos los inmigrantes atacaran a los agentes de la Guardia Civil para no ser devueltos. Pero lo cierto es que si la Administración aplica la Ley, no tiene por qué suceder”, indicaron. En este sentido, consideraron que lo lógico sería que el inmigrante fuera detenido y juzgado en nuestra ciudad y posteriormente deportado a su país. De esta forma, aseguraron, no se produciría ningún efecto llamada.
Los responsables de la AUGC reconocieron que los trámites burocráticos muchas veces hacen que este proceso con el inmigrante se alargue. En cualquier caso insistieron en que la Administración tiene que buscar una solución a esta situación porque la consecuencia final es que los agentes están desprotegidos cuando trabajan en la valla.
“Sabemos que la solución es complicada, pero hay que buscarla y encontrarla”, insistieron. Desde la Asociación Unificada recalcaron que no se puede permitir que se sigan produciendo agresiones en la valla y queden impunes. En este sentido, indicaron que situación como la que se produjo el pasado mes de octubre, cuando un agente cayó de la valla desde más de 3 metros de altura tras recibir la patada de un subsahariano pueden tener consecuencias graves. En aquella ocasión, al igual que ocurrió ayer el inmigrante que supuestamente agredió al guardia civil fue devuelto a Marruecos para que las autoridades de aquel país se hicieran cargo de él. Los responsables de la AUGC no entienden este procedimiento e insisten en que en cada intento de salto se producen nuevas agresiones y en que los guardias civiles que trabajan a pie de valla están totalmente desprotegidos ante este tipo de actuación. “Sólo decimos que debe regir el Código Penal. Si un subsahariano agrede a un agente, igual que si lo hace otra persona, tiene que ser detenido”, apostillaron.