Los sindicatos protestaron ayer en las puertas del colegio junto a un 80% del profesorado.
En el colegio España, el equipo directivo trabaja en la Biblioteca y recibe a los padres de los alumnos en la recepción y en los pasillos. En este centro, la sala dedicada a pedagogía terapéutica y a audición y lenguaje no cuenta con todo lo que debería tener. En el España, hay mucho ruido que molesta a los profesores y alumnos y también hay polvo por todas partes. En el colegio, hay una gran obra que comenzó en septiembre en lugar de iniciarse en junio. “Es el ejemplo de la mala planificación”. De esta forma describen los sindicatos de Educación la situación de este centro educativo. La gran obra que está reformando parte de la cubierta del centro y otras dependencias está causando muchas molestias.
La Junta de Personal Docente no Universitaria y un 80% de los profesores del España se concentraron ayer en las puertas del colegio para protestar por dos motivos específicos. Además de por las dificultades que hay en el España, los maestros demandan más centros educativos para que baje la ratio de las clases. En el España están por encima de los 30 estudiantes por aula. Los sindicatos afirman que la única forma de mejorar este aspecto es la construcción de centros nuevos y para ello exigen que los Presupuestos Generales del Estado recojan una partida para estos proyectos.
Además, la segunda motivación que lleva a los docentes a manifestar su ‘descontento’ es la actitud del Ministerio con ellos en los últimos meses. Aseguran que la Administración no ha negociado con los sindicatos para aprobar normativas que afectan a sus condiciones laborales.
Un colegio ‘en obras’
En cuanto al España, CSI-F explicó ayer a El Faro que está previsto que las obras finalicen en el mes de marzo. Sin embargo, el sindicato señaló que no le extrañaría nada que se alargue hasta final de curso esta reforma. Apuntó que es siempre un riesgo realizar este tipo de reformas para los alumnos y profesores. De hecho, las clases en el centro comenzaron una semana más tarde para garantizar la seguridad de todos los componentes del centro.
Por su parte, ANPE destacó que a lo complicado que es convivir con una obra se le suma que el colegio tiene un gran número de alumnos con dificultades con el castellano.
El sindicato resalta que el España no es un centro de ‘difícil desempeño’, pero podría tener esta calificación por sus características. Si a las dificultades de los alumnos le sumas la distracción de una obra, el resultado es que las clases van más lentas de lo que deberían, apunta. Además, no hay posibilidad de hacer desdobles en la clase para que un grupo de alumnos pueda hacer refuerzo en una materia. No hay más aulas en el centro donde crear espacios de formación ni si quiera hay más huecos en las aulas donde acoger a más niños, si continúan las matriculaciones de última hora.
ANPE indica que cuando comenzó el curso, la situación era más agobiante para los docentes y los alumnos. Tuvieron que cortar el aire acondicionado, pero no podían abrir las ventanas porque entraba mucho polvo y todo el ruido de los obreros tirando muros. Ahora la situación está mejor porque hay menos golpes, pero aún así, este curso estará marcado por la reforma.
Reforma de los centros
La Junta de Personal Docente no Universitaria insiste en su protesta que no sólo hace falta la construcción de nuevos centros, sino mantener en perfectas condiciones los que ya tienen unos años. Señala que hay un gran número de colegios e institutos que necesitan un constante mantenimiento y mejoras para que puedan seguir funcionando más décadas.
Asimismo, los sindicatos destacan que no sólo es preciso dotar de presupuesto a un proyecto, sino ejecutarlo y ponen de ejemplo el centro educativo que se está construyendo en el antiguo Mercado Central, que lleva años con partidas presupuestarias asignadas y aún no se ha terminado.
Por último, la Junta de Personal Docente no Universitaria critica que el director provincial, José Manuel Calzado, afirmara hace unos días que no se habían manifestado con el equipo de dirección anterior. Los sindicatos dicen que “falta a la verdad” y aseveran que continuarán con las protestas hasta finales de año.