Un grupo de inmigrantes de origen subsahariano protagoniza hoy un nuevo intento de entrada masiva a Melilla a través de la valla fronteriza que separa la ciudad autónoma de Marruecos, que ha vivido un repunte de la presión migratoria en el mes de octubre.
Los inmigrantes que se habían encaramado tras haber protagonizado un intento de entrada masiva, han decidido bajarse de la verja, al cumplirse las dos horas de su acción.
Eran alrededor de 30 los subsaharianos que permanecían en la zona del entrevallado, ante un fuerte despliegue de la Guardia Civil.
Tras descender de la valla, los inmigrantes han sido entregados a las autoridades marroquíes, que se han hecho cargo de ellos.
Según han informado a Efe fuentes policiales, la tentativa se ha producido sobre las 06:30 horas por la zona comprendida entre los puestos fronterizos de Beni Enzar y Barrio Chino.
Algunos de los inmigrantes han conseguido acceder a la zona del entrevallado, donde lanzan gritos de "libertad, libertad" o el tradicional "Bosa, Bosa".
Tanto en el lado español como en el marroquí se ha establecido un fuerte despliegue de seguridad, mientras que la carretera de circunvalación de Melilla, que discurre paralela al perímetro fronterizo, permanece cortado en algún tramo por motivos de seguridad.
La presión migratoria sobre Melilla es extrema desde hace meses, si bien ha sufrido un repunte a lo largo del mes de octubre, tras un mes de septiembre relativamente tranquilo, con una única tentativa registrada.
Ayer, alrededor de una veintena de subsaharianos protagonizaron un nuevo intento de entrada a Melilla
A lo largo de 2014, año récord en materia migratoria en Melilla, alrededor de 4.000 inmigrantes han entrado a la ciudad autónoma, de los que alrededor de 2.000 lo han hecho a través de la valla perimetral