La Agencia de la ONU reclama un dispositivo que funcione como en la crisis de los cayucos.
La Agencia de la Organización de Naciones Unidad para los Refugiados (Acnur) cree que la saturación del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de la ciudad (CETI) se puede frenar agilizando los traslados a la península. “En 2005 cuando llegaron 31.000 personas a Canarias, hubo una política de traslados bastante ágil y sería bueno que ese mismo dispositivo se empleara ahora en Melilla”, señalan desde esta organización a El Faro.
La propuesta de Acnur coincide con el discurso del delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, que en más de una ocasión ha reiterado el empeño que pone en sus gestiones con Madrid para conseguir que se agilicen los traslados de inmigrantes a la península. Sin embargo, en la práctica, los extranjeros salen a cuentagotas.
Según han explicado desde la propia Delegación del Gobierno, la ralentización de las salidas de inmigrantes hacia la península depende también de la capacidad de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs) que están llenos hasta la bandera. Esto se debe, según denuncian las ONGs, a que los subsaharianos permanecen retenidos el máximo tiempo establecido (60 días) con la intención de gestionar el retorno a su país de origen, algo que a menudo no sucede porque España no tiene convenio de repatriación con el lugar de procedencia de muchos de ellos.
Atención al refugiado
Descongestionar el CETI ayudaría, según Acnur, a prestar una mejor atención a los casos de potenciales refugiados que están llegando a la ciudad por la frontera o saltando la valla. “Hay un número cada vez mayor de extranjeros que llegan a Melilla y que podrían ser refugiados. No se trata sólo de los que saltan la valla. Ahora, por ejemplo, hay mucha gente de la República Centroafricana que llega huyendo de la limpieza religiosa que está teniendo lugar en ese país, donde se están matando cristianos y musulmanes”, subrayan desde la Agencia de la ONU para los Refugiados.
Y no es el único caso “de libro”. Según han explicado a El Faro, los sirios son reconocidos como refugiados simplemente por ser sirios. “En el momento en que se puede demostrar que son de Siria y que se comprueba que no han cometido crímenes contra la humanidad, son reconocidos de forma grupal”, añaden desde el organismo de Naciones Unidas.
Acnur tiene claro que los ciudadanos sirios están viviendo una odisea para llegar a Europa. “Salen de Siria en dirección a Líbano y de ahí van a Egipto, donde ahora no son bien recibidos ya que El Cairo ha empezado a pedirles visados porque los asocia con los Hermanos Musulmanes. Hay casos de familias enteras detenidas. Ahora mismo, Egipto no es un país seguro para los sirios. Por eso están viajando en avión hacia Libia y de ahí a Argelia, donde suben a un autobús con destino a Marruecos”, comentan desde Acnur.
La Agencia de la ONU para los Refugiados tiene constancia de que los sirios se las arreglan para entrar por la frontera de Melilla de forma ilegal y para ello “están dividiendo a las familias”.
En ocasiones, comentan desde Acnur, los padres entran sólo a los niños y la Policía los coge y los lleva a centros de acogida, algo que la organización avala. “Hay que tener mucho cuidado. Los menores deben permanecer en los centros de acogida hasta que se demuestre la afiliación”, señalan.
En cualquier caso, desde Acnur apuntan que no es necesario proceder de un país en guerra, como Siria, para ser un potencial refugiado. “Se da el caso de mujeres que huyen por motivos de género, porque se niegan a matrimonios forzosos o que escapan de crímenes de honor. También están los homosexuales, las personas a las que se les impide estudiar o las que sufren el rechazo de sus propias familias”, insisten desde la Agencia de la ONU para los Refugiados.
En esencia, Acnur considera que Melilla no puede convertirse en un tapón que ponga en riesgo la vida de estas personas.
“Hemos quedado impresionados con el CETI”
Representantes de Acnur, que visitaron Melilla la semana pasada, se deshacen en halagos a la hora de valorar la labor del personal que trabaja en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla, bajo la dirección de Carlos Montero. “Nos hemos quedado impresionados con la entrega de la gente del CETI, que hace que todo funcione pese a la sobreocupación”, aseguraron a El Faro.
Asimismo, desde la Agencia de la ONU para los Refugiados han destacado que han notado “signos positivos” de avance en materia de detección de potenciales refugiados y buena disposición “para acoger las recomendaciones hechas por Acnur”.
Hay que tener en cuenta que esta organización tiene voz (sin voto) a la hora de conceder la orden de protección de asilo, que finalmente otorga el Ministerio del Interior.
Traslados
Una gestión similar a la de la crisis de los cayucos
Acnur propone que el Gobierno gestione los traslados de inmigrantes a la península para descongestionar el CETI, de una manera similar a cómo se hizo en Canarias en 2005, durante la crisis de los cayucos.
Ralentización
Los CIEs están llenos hasta la bandera
Los Centros de Internamiento de Inmigrantes están llenos hasta la bandera porque la mayoría de extranjeros permanece retenida el máximo tiempo que contempla la ley (60 días).
Refugiados
“Sólo por ser sirio”
La Agencia de la ONU para los Refugiados asegura que los sirios son reconocidos como refugiados sólo por ser sirios. Basta con que demuestren que proceden de Siria y que se compruebe que no han cometido crímenes contra la humanidad durante la guerra en su país.
Avances
Mejoras en el CETI
Acnur ha detectado “signos positivos” en el tratamiento a los potenciales casos de refugiados en el CETI de Melilla, pese a la saturación que vive el centro desde mediados del año pasado.