Tanto Deportivo Alavés como UD Melilla se juegan toda la temporada a un solo enfrentamiento en la tarde del próximo domingo en tierras vitorianas.
Una semana importante le queda por delante a la escuadra de nuestra ciudad de cara a afrontar con muchas garantías el encuentro de vuelta de la primera ronda para el ascenso a la Segunda División A, frente al Deportivo Alavés, en la tarde del próximo domingo a partir de las 18:00 horas sobre el tapete del estadio de Mendizorroza con la única intención de conseguir la victoria y pasar por la puerta grande a la siguiente eliminatoria.
Después de observar el partido de ida, cabe destacar que los melillenses tienen suficiente calidad para derrotar a los alavesistas que tan sólo se mostraron superiores en su sistema defensivo y sobre todo el juego de Javi Casares que con espacios es uno de los jugadores más peligrosos de su equipo, aunque en el partido de vuelta todo el panorama puede cambiar.
Otro de los puntos a destacar es la presión que pueda ejercer la afición vitoriana que a buen seguro abarrotarán las gradas de este terreno de juego, a sabiendas de la importancia que puede tener cada uno de los acercamientos a ambas porterías, puesto que el partido se puede decantar por el primer equipo que consiga el primer gol, ya que el rival tendrá que jugar a remolque del marcador. La semana de entrenamientos tiene que ser muy importante, sobre todo para intentar recuperar a algunos de los efectivos que se perdieron el encuentro de este sábado por no recuperarse a tiempo de sus respectivas lesiones, como son Hans Dibi y Tximo Enguix, y todo hace indicar que podrían estar vestidos de corto para el partido de vuelta, pudiendo incluso entrar en el once inicial, cambiando totalmente las posiciones de algunos jugadores que saltaron en la tarde del pasado sábado.
Mención especial se merecer el apoyo de la afición local, que se de cita en masa para presenciar el choque ante el Alavés, por lo que, todo hace indicar que la actual plantilla unionista ha podido enganchar a muchos más aficionados que en los partidos de la fase regular, donde las entradas fueron muy pobres pero ayer todo quedó en el olvido. La casta, entrega y sacrificio de cada uno de los componentes de la UD Melilla fue muy importante para conseguir la victoria, lo que demuestra una vez la implicación que tienen cada uno de los componentes de esta escuadra para intentar conseguir el prioritario objetivo de conseguir el ascenso de categoría, aunque para darse esta circunstancia aún queda mucha lucha por delante, unos 90 minutos que se presentan como muy atractivos para observar que equipo pasa.