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El consejero de Bienestar Social señala que hay reuniones periódicas entre las dos administraciones
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, aseguró ayer que cuando el Defensor del Pueblo hace recomendaciones relativas a la expedición de documentación de menores extranjeros, lo hace sin tener en cuenta las características específicas de nuestra ciudad. Recalcó que en Melilla se cumple con la normativa, aunque insistió en que ésta no está adaptada a las necesidades de la ciudad. En declaraciones a El Faro, Ventura apuntó que no se puede comparar lo que sucede aquí con lo que ocurre en otros puntos del país en los que la entrada de jóvenes no es tan masiva.
Ventura aseguró que desde su área reciben positivamente todas las recomendaciones que llegan desde la entidad que preside Soledad Becerril. No obstante, lamentó que en la mayoría de los casos éstas hagan referencia a hechos concretos y no a la realidad general que se vive en nuestra ciudad.
En este punto, el consejero de Bienestar Social indicó que hay muchos de estos menores extranjeros que aunque están registrados en el centro porque han pasado por él, no han estado el tiempo suficiente para que se les haga un seguimiento. Señaló que aprovechan esta circunstancia para denunciar después que la Administración no ha realizado los trámites documentales necesarios.
Casos puntuales
El consejero reconoció, eso sí, que pueden darse casos puntuales en los que haya algún problema, pero negó que sea algo habitual. Aseguró que cuando los niños salen del centro tras cumplir los 18 años se les entregan todos los documentos, tal y como marca la normativa. Dijo que si entran y se marchan no hay tiempo de tramitar ninguna documentación.
En cuanto a la supuesta falta de coordinación existente entre la Consejería y la Delegación del Gobierno en esta materia, Ventura dijo que ambas administraciones mantienen reuniones periódicas precisamente para evitar que se dé esta situación.
La labor de las ONG
El consejero lamentó que las ONG locales, como Prodein, que acuden a instituciones como el Defensor del Pueblo a hacer sus denuncias, no se preocupen realmente de cuáles son las necesidades de los niños. “Lo único que pretenden es hacer ver que la Administración no tiene corazón en su trato a los menores, pero no es así”, aseveró Ventura.
El consejero explicó que hay un plazo de entre tres y nueve meses para realizar los trámites documentales de estos niños y recalcó que éste se cumple en la práctica totalidad de las situaciones.
“Si el único problema es el documental, que pongan una oficina en la frontera”
El consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, señaló ayer que si lo único importante en la atención a menores es la tramitación de la documentación, lo que deberían hacer es poner una oficina de extranjería en la frontera para hacer estas gestiones en cuanto los chicos tratan de entrar en nuestra ciudad. El consejero consideró, no obstante, que el interés en el trato a estos menores debe ir más allá de la cuestión documental, aunque sin dejarla de lado. Señaló que lo importante es conseguir que estos jóvenes tengan una mayor calidad de vida y que puedan acceder a más oportunidades. Puso en valor el trabajo que se hace desde su Consejería e insistió en que independientemente de las dificultades que haya por el elevado número de menores que entran en Melilla, siempre se cumple con la legalidad vigente en la atención a estos chicos.