El primer pasajero fue un joven melillense con residencia en Málaga.
La línea marítima entre Melilla y Motril vivió en la jornada de ayer su día grande, pues se realizó el primer trayecto regular de la nueva ruta con un total de 52 pasajeros abordo y diez vehículos en bodega.
Curiosamente, el primero en poner el pie en el barco fue un joven melillense que reside en Málaga, cuyo nombre es Miguel García y que optó por tomar la nueva línea para ahorra tiempo y dinero.
El ‘Volcán de Timanfaya’ partió puntual a las 14:30 del puerto granadino rumbo a Melilla, atracando en el Muelle Ribera I a la hora prevista, las 19:00.
Según fuentes de la Autoridad Portuaria de Motril, la naviera Armas calificó el número de personas que hizo el primer viaje de la línea como “aceptable”, aunque se espera que en los próximos días el número de pasajeros se incremente.
El ‘Volcán de Timanfaya’ pasó el resto de la jornada en el Ribera I, a la espera de zarpar esta mañana rumbo a tierras granadinas a las 8:00 horas.
La expectativas de la naviera es que la nueva ruta incremente de manera notable el tráfico de pasajeros de ambos puertos.
Aunque en un primer momento se habló de medio millón de viajeros al año, desde la Autoridad Portuaria melillense han preferido calcular a la baja y hacer cuentas barajando la cifra de 100.000 personas, número con el que se restaría un cinco por ciento aproximadamente del tráfico de pasajeros del Puerto de Nador. Habrá que esperar a los próximos meses para comprobar si se cumplen las expectativas.
Los billetes ya se venden en la Estación Marítima.
En la jornada de ayer la naviera Armas comenzó a vender los primeros billetes de la línea con Motril en la Estación Marítima, donde se ha instalado un stand para facilitar la compra. No obstante, los pasajes podían adquirirse desde días pasados por Internet.
La intención de la naviera canaria es mantener unos precios asequibles y competitivos para los melillenses. Por el momento, un residente en Melilla puede viajar en butaca en trayecto de ida y vuelta por 33 euros, mientras que los no residentes deben pagar el doble, 66 euros. Además, hay descuentos por edades.
Por otro lado, se han establecido varios paquetes promocionales, como el de dos pasajeros y un vehículo por un precio aproximado de 150 euros.
En cuanto a los camarotes, el precio para los residentes es de 70 euros para los que disponen de dos plazas y de 220 para los de cuatro.
Con estos precios, la naviera de Antonio Armas espera captar clientes e incrementar el tráfico de pasajeros anual entre ambos puertos de manera reseñable.