Hay circunstancias que definen bien a las personas y una de ellas es comprobar cómo son en la derrota. Y, en ese sentido, hay que destacar la deportividad con que se ha desenvuelto Javier Lence, el candidato a la presidencia regional del PP, que no ha conseguido el apoyo suficiente de la militancia para que fuera el Congreso del día 24 el que resolviera la pugna con el otro aspirante, Juan José Imbroda.
Ayer, en rueda de prensa, asumía la victoria de su contrincante interno y lanzaba un mensaje muy positivo y que dice mucho sobre él: pidió que todos los militantes estén a una detrás Imbroda y apostó decididamente por la unidad interna del partido de cara a unas elecciones que, según dijo, ganarán los populares.
Lence ha sabido perder y ha mantenido una buena actitud. El propio Imbroda confesó en rueda de prensa que, nada más conocerse los resultados de las votaciones en el seno del PP, lo llamó para felicitarle por los resultados que había obtenido y que le permiten ahora ser el candidato único a presidir la organización popular de Melilla otros cuatro años más.
En definitiva, la democracia interna ha funcionado y el PP se ha reforzado de cara al Congreso y eso también es importante para Melilla cuando hablamos del segundo gran partido político en España. Si de algo pueden sentirse satisfechos los populares es de haber atravesado un proceso congresual con una participación muy alta, algo inusual en los partidos melillenses. Y si eso ha sido así es, precisamente, gracias a la candidatura alternativa que Lence encabezaba.
La decisión de Javier Lence de presentar candidatura movilizó por completo a los populares, tanto a favor como en contra, y ha permitido que más de setecientos militantes fueran a votar candidaturas, algo nunca visto en el seno de esta organización.
La movilización del partido ha hecho que los populares ahora se sientan fuertes, que dejen atrás la paralización y la decepción que han sufrido estos tres años por haber perdido el Gobierno y lleguen al Congreso “con las pilas cargadas”, como decía Imbroda. Un cónclave, además, en el que estará presente el presidente nacional, Alberto Núñez Feijóo, cuya presencia ha vuelto a ser confirmada, y que servirá para que el PP desgrane públicamente todas sus propuestas sobre el futuro de la ciudad.
Mucha euforia se pudo ver ayer en las filas populares. Imbroda asegura que ahora son “como un cohete” y que no habrá quien les pare pero quedan ocho meses hasta las elecciones de mayo de 2023 y mucho partido por disputar todavía.