Estos melillenses recordaron que este espacio reservado para la cultura antes albergaba un cine en el que se podía ver una película por una ‘perra gorda’.
La consejera de Cultura, Simi Chocrón, recibió ayer a un grupo de 17 personas usurias del Centro Social de Mayores de Melilla. Este grupo con movilidad reducida, en algunos casos por la edad y otros por una enfermedad, disfrutó viendo las remodelaciones que se han llevado a cabo en este teatro y que no tiene nada que ver con el que recordaban de su niñez.
Antonia López, de 89 años, recordó que cuando era una niña venía a este lugar para ver alguna película en compañía de su abuela. No consiguió acordarse de cuanto le costaba el dinero, pero aseguró que eso se debía a que siempre era ‘mamá Teresa’ la que pagaba este capricho. Antonia incidió que nada más entrar por la puerta salían corriendo todas las niñas a coger las butacas de delante, porque sino se quedaban sin ver nada al ser tan pequeñas.
Antonia Reina aseguró a sus 91 años que ella también ha venido a este lugar cuando era un teatro. Indicó que la entrada infantil costaba ‘una perra gorda’. De esta forma, destacó las buenas tardes que pasaba con sus amigas en este maravilloso cine. No recordaba muy bien los teatros que se hacían en este lugar, pero comentó que cuando era joven iban a ver las películas de Carlos Gardel, de quien confesó, estaba totalmente enamorada.
Este grupo era la primera vez que venía al teatro Kursaal tras el cambio que ha dado y quedó encantado con la decoración y amplitud de la sala de butacas.
Chocrón destacó que el Centro Social de Mayores organiza para un grupo de personas que realizan el programa del centro de día una serie de excursiones a diferentes entidades de la ciudad y edificios emblemáticos.
La consejera destacó que desde la Ciudad se quiere dar a conocer este teatro a aquellas personas que no han podido visitarlo por diferentes motivos. Este grupo ya ha visitado el Club Marítimo y los museos de la Ciudad, por lo que tenían muchas ganas de ver el Kursaal, según apuntó Chocrón.
La titular de Cultura explicó que al tratarse de un grupo de personas dependientes mayores de 60 años venía acompañado por dos auxiliares, una enfermera y una psicóloga, es decir, parte del equipo que les suele atender a diario en el Centro Social de Mayores.
“Es una visita muy sentimental, porque son personas que han acudido y conocían el teatro de hace mucho tiempo y vinieron al Cine Nacional situado en este lugar”, apuntó.
Chocrón aseguró que este tipo de iniciativas se hacía con mucho cariño por parte de la Ciudad, ya que se trata de personas mayores que han tenido que luchar mucho a lo largo de sus vidas y que han vivido tiempos más complejos que los actuales y por ello merecen estos mimos y cuidados.
Se les explicó la historia de este lugar y se les entregó un folleto informativo además de un pin de la Ciudad. Por otro lado, muchos fueron los mayores que identificaron los rostros de las esculturas de los artistas más representativos de Melilla que están situados en la segunda planta de este teatro, como Fernando Arrabal.
La consejera destacó que este tipo de iniciativas también se pueden emprender por parte de otros colectivos de la ciudad y que la Consejería estaría abierta a las propuestas que llegaran de diferentes grupos para ver el teatro.