El agente exculpó a la mujer que viajaba con él, cuando la Guardia Civil halló más de 100 kg. de hachís en los huecos naturales del coche.
Un agente de la Policía Nacional aceptó ayer una condena de 3 años y 3 meses de prisión y una multa de 170.000 euros por un delito de tráfico de drogas. En el juicio, celebrado en el Juzgado de lo Penal 2, el acusado exculpó a la mujer que le acompañaba el 28 de febrero del año pasado, cuando la Guardia Civil halló más de 100 kilos de hachís en los huecos naturales del vehículo.
La pareja se disponía a embarcar en el buque con destino a Almería, cuando el perro detector de drogas de la Guardia Civil marcó el automóvil del procesado. Los agentes realizaron una inspección del vehículo, un todoterreno, y hallaron en los huecos de los parachoques y en un doble fondo en los bajos del coche un total de 312 paquetes de droga. El peso total del estupefaciente fue de 114 kilos de hachís. La Guardia Civil destacó en su nota de prensa sobre esta intervención, que la droga tenía la más alta concentración del principio activo del hachís, el THC (tetrahidrocannabinol) resultante de la primera tamización de la planta.
Un pago de 20.000 euros
El policía nacional, de iniciales J.J.G.P., reconoció ante el juez que sabía de la existencia de la droga, si bien desconocía la cantidad exacta, y explicó que le ofrecieron 20.000 euros por llevar la droga a la península. Declaró que en aquel momento necesitaba dinero para pagar deudas generadas por su adicción a la cocaína.
La mujer que le acompañaba en el coche el día de los hechos aseguró que no sabía nada de la existencia de la droga escondida en el vehículo. Explicó que conocía al policía nacional, en quien confiaba, y afirmó que el acusado no le dijo en ningún momento que en el todoterreno había droga escondida. Su abogado defensor, en el alegato final, solicitó la libre absolución de su cliente.
Uno de los guardias civiles que participó en la extracción de la droga, explicó ante el juez que, después de que el perro detector marcara el vehículo, hallaron 312 paquetes de hachís en los huecos de los parachoques y en un doble fondo construido a lo largo del suelo del coche.
En el último turno de palabra, el policía nacional procesado pidió disculpas públicas “por el daño que haya podido hacer”.
El Ministerio Fiscal rebajó la solicitud de la condena para los acusados, dado que el agente procesado reconoció los hechos. El abogado defensor manifestó su conformidad con una pena de 3 años y 3 meses de prisión para su cliente y la multa de 170.000 euros por un delito contra la salud pública.