Los empresarios se han debido sentir como el equipo de fútbol que necesita un gol para no descender de categoría, juega los 90 minutos sin parar de disparar a portería pero es al final, en el último suspiro del partido, casi en el tiempo de descuento, cuando llega el ansiado tanto. Eso es lo que ha sucedido con la bonificación al 50% de las cuotas patronales a la Seguridad Social, que se han mantenido en el tiempo hasta 2026 en el último Consejo de Ministros que celebra este Gobierno antes de las elecciones del próximo domingo.
Como dice el refrán, bien está lo que bien acaba pero cabe preguntarse por qué esperar hasta el final, por qué tanta incertidumbre. Hace meses que se venía reclamando que se derogara la norma por la que esa subvención debía desaparecer con fecha del 1 de septiembre y lo único que se respondía era que se estaba trabajando en ello y que la bonificación se mantendría.
Pero pasaba una y otra y otra semana y el Consejo de Ministros no daba señales de vida con respecto a la petición agónica de los empresarios y los sindicatos melillenses, que la pasada semana hacían un SOS desesperado para que la medida se aprobara antes de que llegaran las elecciones.
Afortunadamente se puede decir que ayer hubo una buena noticia para los afectados que, en definitiva, son prácticamente todos los sectores productivos privados de la ciudad.
La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, no ha tardado en hacer público un tuit para informar sobre la decisión adoptada en torno al 50% de bonificación para recordar que el PSOE cumple sus compromisos y, en ese sentido, había afirmado tiempo atrás que la subvención se mantendría tal cual entre tanto se estuviera desarrollando el plan estratégico y Melilla estuviera configurando su futuro modelo económico.
Y hubo ayer otra resolución del Consejo de Ministros que tampoco está nada mal para el devenir de la economía de Melilla.
Se trata de la aprobación del convenio para que pueda crearse la oficina técnica que se encargará de desarrollar el plan estratégico del Gobierno central en lo que a la atención a pymes y emprendedores se refiere. Es una medida importante porque el propio Ejecutivo reconoce que los trámites no van a ser fáciles y se necesita, por tanto, una asesoría acorde con la importancia de las políticas que se van a desarrollar y que, según el Ministerio de Política Territorial, estará por encima de los 350 millones de euros para Melilla en los próximos tres años.