UGT ha valorado negativamente los datos de desempleo que se han conocido esta mañana, dado el aumento de parados en 439 personas, lo cual significa casi un 6% más que en julio hasta alcanzar la cifra de 7.816 afectados. La secretaria de Políticas Sociales y Empleo del sindicato, Dolores Creus, ha resaltado asimismo que sí ha bajado el paro entre los extranjeros, que se ha situado en 1.612 personas.
La organización ugetista indica que, aunque el paro aumenta en agosto como consecuencia del fin de la temporada estival, “la fortaleza del empleo y la mejora de su calidad persisten, fruto de la reforma laboral pactada en el ámbito del diálogo social”. No obstante, señala que es preciso seguir manteniendo el escudo social y las medidas de apoyo, garantizar el poder adquisitivo de los trabajadores con cláusulas de revisión en los convenios y subir el SMI hasta que alcance los 1.100 euros en 2023.
Para la UGT, los datos de paro registrado publicados por el Servicio Público de Empleo (SEPE) y de afiliación por la Seguridad Social para el mes de agosto “muestran una vuelta al dinamismo en el mercado laboral tras el ligero parón de julio”. “Eliminando los efectos de estacionalidad y calendario se aprecia un aumento de los afiliados respecto al mes anterior, aunque, en media mensual, disminuyen, como suele suceder en los meses de agosto. También los parados registrados aumentan, como consecuencia del final de la temporada de verano, que pone fin a muchos contratos realizados para cubrir la actividad de estas fechas”, explica.
Según afirma, “son datos que, en tendencia, siguen mostrando la fortaleza del empleo en nuestro país, pero también la necesidad de mantener el escudo social y las medidas de apoyo frente a los efectos de la guerra en Ucrania la elevada inflación o la subida de tipos de interés. No hay motivos para la alarma, pero sí para la preocupación y la prevención”.
Los salarios deben crecer
Los ugetistas entienden, asimismo, que el principal problema que debe afrontar ahora la economía “es la merma de la capacidad adquisitiva que están padeciendo las familias porque, aunque se haya creado empleo hasta niveles nunca vistos en la economía española y, desde enero de 2022, haya sido esencialmente de carácter indefinido, la realidad es que los salarios reales están disminuyendo a un ritmo vertiginoso”. “Teniendo en cuenta la media de las tasas anuales del IPC hasta agosto (9,0%) y el promedio de las subidas salariales registradas en convenio hasta julio (2,6%), que es el último dato disponible, la pérdida de poder de compra salarial en lo que va de año se eleva a 5,9 puntos porcentuales”, insiste el sindicato.
Por eso, considera “imprescindible que se amplíen las medidas adoptadas hasta ahora para proteger la creación de empleo y la calidad de vida de las personas trabajadoras, construyendo un verdadero pacto de rentas a la altura de la coyuntura”. “La negativa de la CEOE a llegar a un acuerdo en esta materia es un despropósito, sobre todo cuando la economía actualmente requiere de certidumbre. El esfuerzo para superar los inconvenientes ocasionados por el conflicto bélico en Ucrania debe ser colectivo, y las empresas deben ajustar sus márgenes, principales responsables del aumento de la inflación”, concluye la organización ugetista.