El secretario general de UGT-Melilla, Francisco Díaz, ha asegurado, en relación a los datos del paro conocidos este viernes y que hablan de un aumento en 253 personas en el mes de noviembre, que “las noticias no son buenas para la ciudad", que "está estancada y tiene una situación económica complicada a la que hay que buscar una solución”.
Díaz, quien ha contrapuesto las cifras de Melilla con las del resto del país, que van en una “dinámica de decrecimiento en cuanto al número de parados”, se ha mostrado “bastante preocupado”, sobre todo por la juventud, y ha opinado que el Ejecutivo central “debe ser más contundente en su apuesta por la ciudad”, tal como le dijo a la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, en un encuentro que mantuvieron a principios de año.
El dirigente ugetista ha reconocido que los planes de empleo aún no han salido, pero ha subrayado que tampoco pueden ser tomados “como una solución viable para la economía de la ciudad”, ya que tan sólo proporcionan empleo de manera “transitoria”.
Por lo tanto, es preciso, según palabras de Díaz, “dar mucho más impulso al dinero que se está destinando a la ciudad lo antes posible para que el sector privado vea que se está invirtiendo desde la Administración General del Estado y tenga más confianza en la ciudad” y, así, el número de parados disminuya.
Preguntado por qué la reapertura de la frontera no está logrando mejorar las cifras de desempleo, el secretario general de UGT-Melilla ha recalcado que la situación ya “no va a existir como era antes”. Por un lado, porque la Administración española está pidiendo el visado para poder entrar a Melilla y “eso es una losa”, opina Díaz, quien ha manifestado que “muchísimos ciudadanos aportaban algún valor añadido a la economía de Melilla y esto no está ocurriendo”. Además, si a ello se suman las colas y el tiempo de tardanza para pasar de un país a otro por los trámites administrativos, la reapertura “no se está produciendo ningún beneficio económico para la economía de la ciudad”, según Díaz.
Por lo tanto, ha insistido, “si no se potencia fuertemente desde la Administración esta ciudad y el sector privado ve que es así, los jóvenes de esta ciudad lamentablemente van a irse” y, ha advertido, “difícilmente se regresa una vez que se sale”.
En este sentido, Díaz ha lamentado que las inyecciones de dinero no están “fluyendo” como teóricamente se había presupuestado, y, al respecto, se ha referido al Hospital Universitario, que él esperaba que estuviera abierto ya a final de este año y que, además de atraer estudiantes universitarios, podría conseguir que “algunos de ellos vieran el futuro aquí”.
EL BARCO UNA VEZ QUE SE HUNDE APARTE DE QUE CUESTA TRABAJO Y DINERO PARA REFLOTARLO YA SE CONVIERTE EN INSERVIBLE...