Trabajadores de la limpieza del aeropuerto de Melilla llevan dos meses sin cobrar sus nóminas de Ingemont Tecnologías

La plantilla que trabaja en labores de limpieza y mantenimiento del aeropuerto de Melilla asegura que lleva dos meses sin cobrar las nóminas que debería pagarles la empresa adjudicataria del contrato, por lo que la Federación de Servicios de Movilidad y Consumo de UGT en la ciudad ha pedido públicamente a AENA que tome cartas en el asunto.

En una nota de prensa, desde UGT defienden que es "inadmisible" lo que está sucediendo en Melilla por lo que reclaman a la empresa pública encargada de la gestión aeroportuaria española que rescinda el contrato a Ingemont Tecnologías S.A, concesionaria del servicio en la ciudad autónoma.

"Nos volvemos a encontrar con otra Administración de AENA que da la sensación de que poco le importan los trabajadores de la contrata que tienen en limpieza y mantenimiento. Volvemos a ver la dejadez en una pronta solución que acabe con la lacra de este tipo de empresas", señala el sindicato.

UGT quiere que AENA rescinda el contrato de manera urgente "para minimizar el daño que se le está haciendo a los trabajadores de Ingemont Tecnologías, familias que van ya para dos meses sin cobrar y sin que nadie les dé respuesta", insisten en su comunicado.

La organización sindical está convencida de que tanto AENA como el aeropuerto de Melilla tienen la responsabilidad moral de no dejar en desamparo a los trabajadores, "que aún sin cobrar siguen ejerciendo su labor como profesionales".

A mediados de mayo pasado, UGT y CCOO anunciaron una manifestación en el aeropuerto de Melilla para reclamar el pago de las nóminas de los nueve trabajadores (6 de limpieza y 3 de mantenimiento) que tiene un aeropuerto que en los últimos meses ha mostrado su satisfacción por el aumento del números de pasajeros.

En mayo pasado los sindicatos aseguraron que tenían noticias de que Ingemont Tecnologías estaba renegociando su contrato con AENA, pero ningún trabajador había podido ponerse en contacto con la empresa para reclamar unos sueldos que, encima, son precarios.