En la última semana de julio que marca ya el meridiano estival de vacaciones, muchos son los ciudadanos melillenses que están disfrutando de sus últimos días de vacaciones de verano, pero, sin embargo, otros muchos comenzarán a disfrutarlas en pleno mes de agosto.
El Faro visitó la costa de la ciudad de Melilla para conocer de antemano cuáles son los hábitos más comunes que tienen los melillenses cuando acuden a las playas.
Ante la presencia de este medio, se pudo observar cómo son muchos los padres que acuden hasta la costa con sus hijos para disfrutar de esta temporada estival, también lo hacen por la mañana los ciudadanos jubilados para caminar, bien sea por el paseo marítimo o bien por la arena pegados al mar.
No obstante, a otros les tocan cuidar y disfrutar de sus nietos mientras sus padres están en horario laboral o de vacaciones.
A Jose Manuel, que se encontraba haciendo deporte en la playa y observando el campeonato de Fútbol Playa que se estaba disputando la mañana del martes en la Playa de San Lorenzo, entre los hábitos más comunes que tiene cuando acude a la costa melillense es hacer deporte por la mañana, y por la tarde acudir con su familia para bañarse en la playa o tomar el sol.
“Como no tengo hijos suelo venir a tomar el sol aunque no me guste mucho, por eso también intento estar en la sombrita o refrescarme. Es verdad que tampoco paso mucho tiempo en la playa”, explicó el melillense.
De la misma manera lo explicaba Alberto, que aprovechaba la playa de Melilla en su visita al campeonato de Fútbol Playa. Para este ciudadano que no es mucho de estar en la playa, prefiere las zonas con chiringuitos “para refrescarse por dentro”.
“Suelo pasar un par de horitas si acaso en la playa porque no me gusta mucho, soy más de chiringuito.”, dijo.
A diferencia de Alberto, a Armando sí le gusta más bañarse en la playa con el “agua calentita” y tumbarse en las hamacas.
Hay otros ciudadanos, como Jesús que prefieren andar por la playa y caminar sobre la arena recorriendo toda la costa.
Mariam suele ser de las melillenses que opta por jugar a las palas con sus amigos en la playa o hacer paddle surf para “pasar el rato”, eso sí, jugar a las cartas dice que no se le da muy bien.
También hay ciudadanas como Mariola que les gusta leer cuando van a la playa como hábito principal para “relajarse”.
Otras, como Marina que tiene su casa a pié de playa, suele bajar todas las tardes para “entanarse” y relajarse tras la jornada de trabajo; aunque los fines de semana si los aprovecha mejor cuando se reúne con sus amigos y aprovechan para hacer comidas en la playa, jugar a las cartas o simplemente tumbarse en las toallas y dirección al sol para “tostarse un poquito”.
Para quienes les gusta el fútbol playa como a Elena, cuenta que aprovecha la pista que hay disponible para jugar con sus amigas o ver el fútbol playa.