Desde Somos Melilla,han comunicado que "somos conscientes de la situación y cuando estemos en el Gobierno no dejaremos a su suerte a nuestro Centro Asistencial de la Gota de Leche y pondremos en marcha un Plan de Reestructuración y Viabilidad del mismo"."El Plan consistirá en aumentar la cartera de servicios asumiendo la acogida de mujeres víctimas de violencia de género, acogida temporal de familias que pierdan su vivienda, atención especializada a grandes dependientes, reubicación del personal en otros centros públicos dependientes de la Ciudad Autónoma, etc. Todas, medidas encaminadas a mejorar la labor asistencial del Centro y a aumentar los ingresos por la prestación de dichos servicios", ha explicado la formación política. Por su parte, la directiva de Somos Melilla, Carmen Molina, ha mostrado su preocupación por "la grave situación económica" que sufre el Centro Asistencial de Melilla. Sus cuentas son críticas y, a este ritmo, no se podrá garantizar el pago de las nóminas de sus más de 200 empleados. La dirigente localista ha señalado que "tras la sentencia favorable a más de 40 empleados que exigían al propio Centro Asistencial un aumento salarial, ha sumido al conjunto de la plantilla en una situación de incertidumbre total ya que, aun percibiendo la inminente subvención de 700.000€ de la Ciudad Autónoma, no se podrá hacer frente a los costes salariales"."Estamos hablando de una subida salarial de aproximadamente 400€", ha aclarado. Carmen Molina entiende las reivindicaciones laborales pero lamenta que se haya judicializado una situación que se debería de haber dialogado y solventado con mejoras progresivas y escalonadas. A esto hay que añadir la caída en los ingresos provenientes de actividades como la Rifa de la Caridad que, ante las limitaciones en el transito fronterizo, ha bajado considerablemente sus ventas. Carmen Molina, que fue empleada de la Gota de Leche y conoce en profundidad la institución, lamenta que los distintos gobiernos de la Ciudad se hayan limitado únicamente a parchear los problemas del Centro Asistencial a golpe de talonario y a no abordar en profundidad su reestructuración para garantizar la viabilidad laboral y económica del mismo.