Un gran número de asociaciones de la tercera edad disfrutan de una merienda que contó con un espectáculo de salsa.
Varias asociaciones y organizaciones de Melilla ofrecieron ayer una ponencia sobre el papel que pueden tener las personas mayores como voluntarios. Aseguraron que la edad no es un impedimento para participar en proyectos de colaboración y cooperación con ONG de la ciudad. Incluso, destacaron que los años de experiencias y vivencias profesionales y personales hacen que los mayores sean un recurso importante para estas entidades sociales. Cruz Roja, Asociación Voluntariado de Mayores, Cáritas y la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer fueron las asociaciones que participaron en esta mesa redonda, que volverá a repetirse hoy en el Casino Militar a las 18:00 horas.
Enrique Delgado, de Cruz Roja, indicó que en Melilla hay pocas personas mayores colaborando con esta entidad. Sin embargo, resaltó que a nivel nacional son muchas las que se animan a colaborar con ellos al jubilarse o al emanciparse los hijos de sus hogares.
Delgado aseguró que son muchos los ancianos que necesitan ayuda y compañía, por ejemplo, para ir al médico o al banco. A ellos les gustaría que personas de edad parecida les atendieran. En Melilla, Cruz Roja asiste a 50 personas mayores que necesitan este acompañamiento.
La presidenta de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, María Dolores Arjonilla, explicó que son necesarios en su entidad más hombres voluntarios, ya que algunos enfermos se sienten más cómodos cuando son otras personas de su mismo sexo el que les ayuda a vestirse. Pasan menos vergüenza, aseguró.
Concha García del Voluntariado de Mayores indicó que siempre necesitan gente que les ayude a la hora de realizar las actividades de ocio con los ancianos del Centro Asistencial. Además, indicó que hay muchas personas con 60 y 70 años que pueden ser voluntarias, ya que no son tan mayores como aparentan.
Salvador Cardona, componente de Cáritas, explicó al público su experiencia personal como voluntario. Se jubiló hace cinco años y desde entonces tuvo claro que su colaboración con la iglesia y con las ONG iba a ser más decidida. No quería quedarse en casa sin hacer nada y por ello, se embarcó en un gran número de trabajos solidarios.
Por otro lado, un gran número de colectivos participaron en una merienda con un espectáculo de salsa organizado por la Semana del Mayor. Entre ellos, Club La Amistad, Centro de Día, Residencia de Mayores, Centro Asistencial, Club Divina Providencia, Comedor San Francisco y Aulas Culturales para Mayores.