CON apenas un día de diferencia, se han producido dos atropellos en la ciudad, uno hechos que deben ser una llamada a la reflexión, tanto para conductores como peatones con el fin de evitar accidentes. El pasado viernes un coche que circulaba por el centro de la ciudad arrolló a una mujer, ésta fue trasladada hasta al hospital Comarcal donde se le hicieron pruebas y el diagnóstico fue contusiones. Tras un tiempo prudencial recibía el alta médica. Este sábado se produjo otro accidente en Reina Regente. En este caso, una mujer fue atropellada al intentar evitar que arrollaran a su hijo. Al parecer el menor se escapó y quiso cruzar la carretera, la madre buscó protegerlo pero un coche pasaba por la vía y ocurrió el accidente. La mujer se encuentra ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Los accidentes ocurren, pero tanto conductores como peatones tienen normas de tránsito que seguir para que las calles sean seguras para todos. Por ejemplo, respetar los límites de velocidad en las vías, así como las señales de tráfico. Pero los peatones también tienen normas que cumplir. Cruzar por los pasos de cebra y no en mitad de la vía, así como esperar que la luz del semáforo del viandante se ponga en verde para pasar las calles, son dos muy sencillas. La seguridad vial depende de todos. Quien conduce debe ser consciente de los riesgos que conlleva ir en un coche, que se pueden sufrir accidentes pero también hacer daño, sin intencionalidad, a los viandantes. Por eso es tan importante que quien conduzca respete cada una de las señales y los peatones hagan lo mismo. Levantar la mano, en señal de disculpas, cada vez que un conductor no respeta un paso de peatones no puede ser una excusa. Pero tampoco hay que olvidar a quienes utilizan patinetes, que al igual que otro conductor, tiene unas normas que respetar para evitar que ocurran accidentes. Aunque sean situaciones muy cotidanias, la vida de todos depende del cumplimiento de las normas viales. Hay que ser cuidadosos y precavidos al volante, mientras los peatones deben estar atentos cuando anden por las calles.