-
Las ONG denuncian que Delegación no haya informado sobre el naufragio de la patera en la que navegaban
Las entidades Pro Derechos de la Infancia (Prodein) y la Asociación Pro Derechos Humanos de Melilla (Apdhml) presentarán una denuncia en el juzgado para que se investigue la muerte de las siete mujeres inmigrantes que naufragaron el pasado domingo en la costa entre Melilla y Marruecos. Así lo anunció ayer el presidente de Prodein, José Palazón, en un homenaje en memoria de estas mujeres celebrado frente al monolito de la Constitución.
Este activista insistió en la necesidad de investigar lo sucedido, ya que “no se ha informado de lo que pasó”. Por ello, tachó de “irresponsable” la posición de la Delegación del Gobierno de Melilla “por no ofrecer información” a los ciudadanos y “asegurar que no saben nada”. “¿Cómo que no saben nada? Algo tendrán que saber”, sentenció Palazón.
El presidente de Prodein hizo especial hincapié en la necesidad de investigar si los agentes de la Guardia Civil o de la policía marroquí implicados en esta operación en la frontera marítima entre ambos países incurrieron en algún delito. “¿Cómo mueren siete personas en la frontera y no dan ninguna explicación? Creemos que se deben investigar los hechos y ver si hay o no algún culpable”, explicó.
Homenaje
Cerca de una treintena de personas acudieron a la concentración frente al monolito de la Constitución para recordar a estas siete mujeres inmigrantes fallecidas. Este homenaje estuvo marcado por la denuncia de la vulnerabilidad que padecen los inmigrantes en las fronteras cuando tratan de entrar al país.
Entre los asistentes al evento se encontraban el diputado de Coalición por Melilla (CpM) Mohamed Ahmed; la representante de la Gestora del PSOE Sabrina Moh; la secretaria general de Podemos en Melilla, Gema Aguilar, y la presidenta de la asociación Intercultura, Yonaida Selam.
El acto incluyó la entrega de ramos de flores sobre el monolito y un encendido de velas tras la lectura de un manifiesto, escrito por el arzobispo de Tánger, Santiago Agrelo. Este texto señaló que “es un hecho que en las fronteras se producen devoluciones en caliente”, las cuales catalogó de “legales”, pero “inicuas, injustas e inhumanas”.
El manifiesto también señaló que “miembros de las fuerzas del orden han dejado morir a muchos emigrantes” y añadió que “de forma activa les han impedido salvar la vida”, bajo la justificación de que “esos emigrantes no tenían ningún derecho a tocar ni alcanzar territorio español”.
El texto criticó la falta de libertad de la sociedad a la hora de actuar frente a estas situaciones, así como la presunta “manipulación” de los ciudadanos debido a los discursos políticos. El manifiesto finalizó asegurando que “las fronteras matan y continuarán matando mientras la sociedad cierre los ojos para no ver a los que en ellas sufren y en ellas mueren”. Al acabar la lectura, se guardó un minuto de silencio que terminó con un gran aplauso.