El delegado del Gobierno anunció ayer que la Guardia Civil ha puesto en marcha un sistema preventivo para evitar, en la medida de lo posible, las entradas de inmigrantes, sobre todo por la zona de la valla fronteriza.
Reconoce la autoridad gubernativa el aumento de la presión migratoria, por otro lado esperada, especialmente por aquello del buen tiempo y que ya durante el año pasado ocasionó grandes problemas, sobre todo en lo que a ocupación del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes se refiere.
No adelantó más de ese sistema preventivo que, por otro lado, ya se dejó notar hace unos días, cuando por espacio de algo más de dos horas un helicóptero sobrevoló la valla fronteriza para disuadir a los inmigrantes que esperaban al otro lado de la frontera con intención de pasar a Melilla, y que según dijo el delegado, se estima que son más de 300.
Todas las medidas son pocas para tratar de paliar un problema que Melilla soporta especialmente en temporadas de buen clima y que evidentemente crea desasosiego en las autoridades locales por los problemas que ello genera.
El delegado también reconoció la ayuda que presta Marruecos para tratar de controlar e impedir la llegada de inmigrantes. Siempre se pone de manifiesto esta predisposición de las autoridades del país vecino, pero todo los años se registran cifras récord de entradas. A lo mejor, ésta es la definitiva y aunque no se eviten todas, sí al menos se reduzca en gran número.