La Policía Local de Melilla informa que “los autobuses destinados al transporte escolar y que realizan dicho servicio en los diferentes centros escolares de la ciudad” cumplen la normativa vigente para poder cumplir esa función.
En una comunicación de prensa se da a conocer que durante los días comprendidos desde el 17 hasta el 21 se ha llevado a efecto en la ciudad autónoma una campaña especial de vigilancia y control del transporte escolar y de menores.
Recuerda la entidad que esos vehículos “deben cumplir la normativa que se recoge en el RD 443/2001 de 27 de abril de ese año", en la que se establecen las condiciones de seguridad que deben regir en el transporte escolar y de menores.
Entre los requisitos establecidos en esa legislación sobresale el referido a la “obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en el autobús por una persona debidamente cualificada". También se reglamentan aspectos como "la antigüedad máxima de los vehículos destinados a este tipo de pasajeros", así como "el seguro de responsabilidad civil limitado" o "la obligatoriedad de llevar señal de transporte escolar", entre otros aspectos de singular importancia.
Destaca la colaboración de los ayuntamientos
Considera de “extraordinaria relevancia” la participación de todos los ayuntamientos en la referida campaña, derivada de la “importancia del transporte escolar en zona urbana, fundamentalmente en determinados lugares donde existe mayor concentración de colegios”.
La Jefatura de la Policía local pone de relieve el hecho de “que está comprobado que a 50 kilómetros/hora, velocidad máxima permitida en vías urbanas, las posibilidades de que un niño sobreviva sin ninguna medida de seguridad es prácticamente nula y que, ni siquiera a poca velocidad se garantiza la supervivencia”.
A inicios del me de octubre del pasado año 2021 la ciudad abrió la convocatoria de ayudas para libros de texto, material y transporte escolar para la Educación Secundaria Obligatoria correspondiente al actual curso escolar 2021-2022. La cantidad asignada para esas actividades ascendía a 1.100.000 euros y se precisaba que el importe a percibir por alumno sería de 400 euros.
Se contemplaba como "requisito imprescindible" estar empadronado en la ciudad en el momento de la publicación de la convocatoria, y en los beneficiarios se incluía a "alumnos pertenecientes a familias perceptoras del Ingreso Melillense de Integración, los jóvenes de las familias cuya renta no supere el umbral máxima establecido en 28.000 euros en el 2020" así como "aquellos alumnos miembros de una unidad familiar que, teniendo ingresos superiores a los 28.000 euros, su ‘renta per cápita’ no supere la cantidad de 5.000 euros".