El modesto taller de costura de Lal La Buya se ha ido abriendo un hueco en las pasarelas con su moda ética. Y cada vez tiene más proyectos de futuro: el director general de la firma Ágatha Ruiz de la Prada, Tristán Ramírez Ruiz de la Prada, que está de visita en nuestra ciudad, se plantea un proyecto conjunto con esta iniciativa de la Consejería de Cultura, que genera autoempleo a mujeres en riesgo de exclusión social.
Ramírez Ruiz de la Prada destacó ayer que el reto de la moda actual es que sea “sostenible y ética” dado la gran cantidad de ropa que consumimos en la actualidad. En esta línea, dijo que hay pocos proyectos que creen prendas de forma respetuosa con el entorno y a través de la responsabilidad social. Por ello, consideró que Lal La Buya es una gran iniciativa que hay que “copiar y fomentar”.
Aunque la firma deberá estudiar cómo encajar esa colaboración, planteó que quizás podría desarrollarse una colección pequeña o mediana con este taller melillense.
Pero el representante de la firma Ágatha Ruiz de la Prada no ha sido el único que ha visitado el taller de Lal La Buya en los últimos días. El diseñador español Armiche Rodríguez llevó a cabo el viernes una masterclass en Melilla para mostrar a las participantes cómo hacer acabados para diseños de alta costura.
Y parece que no solo ellas aprendieron con esta visita. Estos profesionales también han podido conocer un proyecto en el que participan muchas supervivientes de violencia machista y que trabajan por sacar adelante un modelo textil diferente. Otra moda es posible.