Este domingo, atracaba en Melilla un nuevo crucero con 404 pasajeros a bordo. Con motivo de su llegada, en la ciudad se han organizado una serie de actividades comerciales y culturales, que han gustado, no solo a los cruceristas, sino a muchos melillenses que celebran que la Ciudad haga este tipo de eventos. Algunos de ellos, piden que se vuelvan a repetir todos los fines de semana.
Muchas tiendas han abierto de forma extraordinaria este domingo. Casi 50 negocios, que han decidido abrir de forma puntual por la llegada de los cruceristas. En una de estas tiendas, su encargada, Laura, explicó a El Faro que la mañana ha ido muy bien en cuanto a ventas.
Actividad comercial
En su tienda, han conseguido vender más de 700 euros, una cifra alta en comparación con otros días normales. Para Laura, los cruceros son una buena oportunidad para hacer caja, ya que no solo han entrado a la tienda turistas, sino que muchos melillenses han aprovechado la oportunidad para entrar y comprar. Esta encargada está muy satisfecha con el día.
Una de estas melillenses es Aya. Al saber que muchas tiendas estaban abiertas, esta melillense no ha dudado en salir a la calle. Necesitaba comprarse una chaqueta, ya que durante la semana trabaja y no lo puede compatibilizar con salir de compras, así que este día de apertura excepcional le ha pillado muy bien.
A diferencia de esta tienda, otras como la multinacional Sfera no han corrido la misma suerte. Una de sus empleadas, Carmen, explicó a este diario que no se ha notado mucho el atraque del crucero en la ciudad. "Entrar han entrado, pero comprar poco", dijo la empleada.
Más allá de las tiendas de ropa y complementos, para otros negocios como el de Mohamed también les ha ido muy bien. Este melillense trabaja en un kiosco del centro y ha notado un aumento de sus ventas de agua, helados y productos de souvenirs como imanes.
Además, este kiosquero ha podido comprobar cómo las cafeterías cercanas a su negocio estaban a rebosar. Mohamed aseguró a El Faro, que en el momento de la actuación de la artista melillense, María Mendonza, la Plaza Menéndez Pelayo y el Bar Arábica estaban llenos. Para él, no solo los turistas han llenado el centro, sino que los melillenses se han echado a las calles a disfrutar también del domingo.
Después de unas compras, los cruceristas han querido pararse a descansar y tomar un tentempié en las terrazas de los bares que estaban abiertas. Esto es lo que aseguró a El Faro Selenia, una de las camareras del restaurante La Selecta. Aunque ella no estuvo trabajando durante la tarde, sus compañeros en el cambio de turno le comentaron que habían tenido mucho trabajo.
Según contó esta camarera, sobre las 11 de la mañana llegaron muchos turistas y melillenses, coincidiendo con las actuaciones del centro, que se sentaron en el negocio donde trabaja. "Se ha notado bastante", dijo Selenia.
"Ahora mismo no hay muchas cafeterías abiertas los domingo, así que las pocas que haya son las que más se van a llevar", comentó la camarera de La Selecta. Para ella, al haber pocos locales de hostelería abiertos los domingos en el centro, los que sí prestan servicio, están repletos. "Pero esta tarde ya no hay mucha gente", puntualizó.
Actividades culturales
Y no solo los melillenses y turistas han podido divertirse haciendo unas compras. A las 11 de la mañana, el payaso Sarapín abrió esta jornada de actuaciones. Los más pequeños pudieron pasar un buen rato con él. Algunos niños como Leo, aseguró a El Faro que se había divertido mucho con Sarapín.
Este pequeño acudió junto con sus abuelos a la actuación en la calle O´Donnell. Lo que más le gusta del payaso, dijo, son los trucos de magia que hace. "Me gusta la magia", comentó este niño.
Además de Sarapín, María Mendoza amenizó el mediodía en la Plaza Menéndez Pelayo y el Ballet Colores actuó en O´Donnell ante un centro de Melilla repleto de turistas y melillenses. De esto pudo dar fe Lucía. Ella estuvo toda la mañana del domingo en el punto violeta de la calle O´Donnell.
"Sobre las 11 ha empezado ha llegar gente, sobre todo extranjeros", comentó a este diario Lucía. Muchos de ellos, se acercaban al punto violeta para preguntar sobre él. "Ha estado muy animadito, había alegría", añadió.
Para ella, que se organicen actividades para los cruceros que llegan, aporta vida al centro. "Ha estado muy bien, la verdad", dijo.
Y una melillense que disfrutó, y mucho, de la vida de la ciudad este domingo fue Puri. "Me ha encantado, estoy satisfecha porque esto tendríamos que hacerlo todos los domingos", aconsejó.
Esta melillense cree que se le debería dar vida al centro los fines de semana con actividades como las de este domingo. "Para disfrutar nosotros, y no tener que irnos por ahí", añadió.
Lo mejor para ella, es que hubo actividades para los niños y bares suficientes para todos los que asistieron. "La gastronomía es buena", reconoció. Además, un punto a favor, dijo, es que había ocio para todos los bolsillos. "Para lo que te quieras gastar", comentó Puri.
Ella estuvo presente en todas las actuaciones. En la de María Mendoza, el Ballet Colores y en la del payaso Sarapín, justo antes de tomar algo por la zona. "Maravilloso, me ha encantado", reconoció. "Que vengan muchos cruceros, que se vea gente, que vean lo bonito que es Melilla. Me encanta", comentó Puri.
Poco a poco el negocio de los cruceros irá dando frutos.
Buen camino para sacar Melilla a flote.