Durante la mañana de ayer, martes 23 de mayo, se pudo ver mucha agitación a las puertas de la Jefatura Superior de Policía, de la que no pararon de entrar y salir furgones que recogían y dejaban a los agentes que iban equipados con distintas armas de fuego o chalecos antibalas.
El motivo de toda esta agitación en el cuerpo de Policía Nacional, en el que estaban incluidos los miembros de la Unidad de Intervención Policial (UIP), fue el establecimiento de varios dispositivos en diversos puntos de la ciudad para la investigación de la supuesta compra de votos de cara a las próximas elecciones del domingo 28 de mayo.
Mientras tanto, en el interior, la gente que se encontraba en la cola iba entrando para hacer sus trámites con aparente normalidad, pero sin dejar de observar lo que pasaba en los alrededores del edificio, donde seguían llegando y saliendo los agentes que componían cada operativo y que, posteriormente, se dirigirían a cada barrio y a cada punto donde se requería de su intervención.Todo este despliegue se producía entre las 9:30 y las 11:00 de la mañana.
Los distintos miembros de la Policía Nacional serían los encargados de hacer los múltiples registros que se llevaron a cabo durante este martes en las zonas de chalets de la carretera de Farhana, de Tadino de Martinengo y Reina Regente desde las 7:00 de la mañana.
Sobre las 12:20 del mediodía, a pesar del movimiento continuo de agentes en los alrededores de la jefatura, aún no había llegado ningún detenido de estas intervenciones, aunque, sobre las 12:30 ya se esperaba la llegada de alguno de los, al menos, 6 detenidos de los que informaron desde Delegación de Gobierno durante esa misma mañana.
Casi a la una de la tarde, todavía entre el ir y venir de furgones y coches de policía en una y otra dirección, un grupo de cuatro agentes salieron a la carrera del edificio de la Jefatura Superior en dirección a las torres V Centenario. Esto ocurrió minutos antes de que se produjera la intervención policial en una de las sedes de Coalición por Melilla.
Unos minutos después, tres coches de policía aparcaron en la acera del lateral del edificio; los agentes que se bajaron hablaban entre ellos mientras ya sí se estaba produciendo el registro en la sede de comunicación de CpM.
Ya sobre la 13:30 de la tarde, un furgón aparcó en los alrededores de la jefatura y de él bajaron varios agentes portando algunas bolsas de plástico.
Tras esto la tensión aumentó y algunos presentes criticaron la actuación policial.
Fuentes a las que este periódico ha podido tener acceso confirmaron el contacto constante entre la Jefatura Superior de Policía de Melilla, la Delegación de Gobierno en la ciudad y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que estaba siguiendo la operación de cerca y preguntaba a los encargados de cada dispositivo los detalles de las operaciones que habían llevado a cabo durante esa mañana para conocer también qué pruebas se habían obtenido y a quien afectaba esta situación en concreto.
Así, la jornada de este martes se desarrolló con mucha actividad en las dependencias de la Policía Nacional, cuyos agentes no pararon de moverse por los distintos puntos de la ciudad en los que se requería su presencia para poder iniciar los respectivos registros.
El recuento total de detenidos, al llegar la tarde de este martes, era de 6 personas entre las que se encontraban el consejero de Distritos y número 3 de la lista de Coalición por Melilla, Mohamed Ahmed Al-lal y, presuntamente, el yerno de Mustafá Aberchán, líder de este mismo partido.
Posteriormente, todos quedaron en libertad hasta que el juez que instruye este caso los llame a declarar.
Por ahora, todas estas investigaciones se mantienen bajo secreto de sumario.