El consejero de Medio Ambiente, Hassan Mohatar, ha afirmado que la ciudad no es responsable de las tumbas rotas que se encuentran en el cementerio de la Purísima Concepción a causa del fuerte temporal que asoló la Ciudad Autónoma esta pasada semana. Ante este asunto, el consejero cepemista ha querido recalcar que las tumbas pertenecen a un particular, es decir, tienen un dueño que es el responsable de su estado. En este sentido, ha apuntado que la ciudad, por cuestiones climatológicas, tiene "poca responsabilidad". A pesar de ello, Mohatar asegura que ha estado en contacto con el responsable del cementerio y que está al tanto de la situación en la que se encuentra el camposanto. "Se le dijo al responsable del cementerio que avisase a los familiares para que viesen cuál era la situación", señala. Aún así, el consejero ha declarado que, una vez evaluado el estado en el que se encuentran las tumbas, intentaría ver "si podemos echar una mano". Sin embargo, ha insistido en que es una propiedad privada y, como tal, el arreglo de los desperfectos compete a los dueños.
Inundaciones en la Ciudad
Debido a las fuertes lluvias que sacudieron la Ciudad Autónoma la pasada semana, se produjeron inundaciones en varias zonas, como el centro, y el cementerio de la Purísima Concepción también registró daños. En poco más de tres horas (desde las 9:00 hasta las 12:00 horas), se llegaron a registrar 42 litros por metro cuadrado de precipitaciones. Debido a esto, las fuertes lluvias humedecieron la tierra del camposanto, convirtiéndola en fango, y provocando que algunas de las tumbas de mayor tamaño comenzaran a hundirse y resquebrajarse. Además, algunas lápidas sufrieron daños y acabaron cubiertas de restos de barro, piedras y hojas. Las playas, debido también al fuerte levante que provocó olas de hasta 10 metros de altura, quedaron destrozadas y acabaron repletas de centenares de kilos de basura después de las inundaciones. Aún así, tanto las playas como el paseo marítimo ya han sido limpiados y restaurados.