Según un estudio del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación , el consumo de carne en los hogares españoles aumentó en 2020 después de años de estancamiento. El Faro ha salido a la calle para comprobar si esta tendencia al alza se ha producido también en Melilla.
El consumo de carne en España ha ido en aumento en el año 2020, concretamente aumentó un 10,5% respecto a 2019. En este año se consumieron 2.087 millones de kilos frente a los 2.305 millones de kilos de 2020.
El Faro ha hablado con Carlos, cocinero de un restaurante de Melilla. Él en su local ve que la gente pide la misma carne que en años anteriores, es más, para este cocinero los melillenses suelen pedirle siempre la carta del pescado mucho más.
Para Carlos, si ha habido un aumento del consumo de carne de Melilla, hay una explicación. Él piensa que al haber estado cerrada la frontera y la aduana comercial, ha habido mucho menos pescado en los supermercados y pescaderías. La gente no se fía de la procedencia del pescado, dice, si es congelado o de picifactorías no se vende tanto. Por ello, si los melillenses se han decantado más en estos últimos años por la carne es debido a la falta de pescado. O eso es lo que piensa este camarero.
Por otro lado, Carlos opina que la gente no está lo suficientemente concienciada, como se esperaba, de consumir de forma más sostenible este producto, tan perjudicial para el medio ambiente y el trato animal.
Las carnes más consumidas fueron el pollo, seguido del cerdo. Es justo el pollo, uno de los quince productos más consumidos junto con el lomo. En 2020 el 37,7% de toda la carne que se consumió fue de pollo y el 30,2% de cerdo.
En esto han coincido dos melillenses que han participado en este sondeo, Enrique y Carlos. Uno por su bajo precio y el otro por la facilidad de cocinarlo.
Enrique come igual de carne que de pescado. Cuando compra en el mercado se lleva pollo, carne para guisar o hamburguesas, lo que esté de oferta.
Fuera de casa, en los restaurantes, Carlos explica que sus clientes se decantan siempre por piezas como el solomillo o el entrecot, aunque siempre hay quien prefiere una pieza de carne pegada al hueso, mas jugosa.
Carlos, en cambio, prefiere mucho más la carne al pescado. Este melillense suele comprar carne de cerdo porque la considera barata y fácil de cocinar, y sobre todo el pollo que "es muy socorrido".
Carlos piensa que el pescado es el plato estrella en la cocina melillense. Al estar próximos al mar, los ciudadanos prefieren comer un pescado fresco de cercanía.
Es lo mismo que cree Pepe, otro melillense al que le gusta mucho más pescado. Este fin de semana se va a Málaga y dice que se va a hinchar de comer pescado.
En una carnicería del centro de Melilla han visto que sus clientes compran cada vez más carne, pero por la época en la que estamos. Jamal es carnicero y sabe que sus clientes suelen comprar ahora que llega el buen tiempo bastante carne para hacer barbacoas en Los Pinos.
Lo que más suele vender son los pinchitos, muy típicos en la gastronomía de Melilla, también hamburguesas, chuletas de cordero y de ternera, alitas de pollo aliñadas o salchichas picantes.
Aunque el consumo de carne haya aumentado en España, los melillenses con los que ha hablado El Faro opinan que el pescado sigue siendo lo que más se consume en la ciudad autónoma, por su cercanía y por lo barato.
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