El diputado por Melilla, Antonio Gutiérrez, habló con su homólogo ceutí para plantear conjuntamente este asunto.
Melilla y Ceuta podrían volver a llevar a una campaña electoral, en este caso las generales del 20 de noviembre, la necesidad de profundizar en el hecho autonómico una vez más, tras la conversación que mantuvo hace dos días el diputado en el Congreso por la ciudad, Antonio Gutiérrez, con su homólogo ceutí.
En este sentido, el diputado popular realizó estas declaraciones ayer a El Faro, momento que aprovechó para comentar que a partir de septiembre se reunirán los comités electorales de campaña de las distintas autonomías con el fin de elevar sus propuetstas al comité central.
En cuanto a la necesidad de profundizar más en el hecho autonómico, señaló que “es un argumento recurrente en el PP” y destacó igualmente que no se trata de reformar el estatuto sino más bien de presentar algunas medidas que permitan “profundizar en la gestión de las competencias existentes”.
“Queremos que el PP nacional lo respalde”, afirmó y adjuntó que el objetivo final es ir igualando las dos ciudades al resto de autonomías del Estado, algo en su opinión, “necesario”.
Por último, también avanzó que el próximo 5 de septiembre se reunirá en Madrid la Junta Directiva del partido nacional y en ella estarán presentes tanto los dos senadores por Melilla, Juan José Imbroda y María del Carmen Dueñas, como él mismo.
Será entonces cuando se pongan a trabajar los comités de campaña regionales con el fin de preparar las propuestas que se enviarán más tarde al comité central, una maquinaria que, en palabras del PP local, ya estaría engrasada y preparada para las elecciones.
Reforma constitucional
El diputado popular también terció en la última sesión parlamentaria en la que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció una reforma constitucional con el fin de establecer por ley un límite al gasto público y el endeudamiento.
Sobre este asunto, reseñó que “el pleno supuso una enmienda a la legislatura de Zapatero” y señaló que fue “una decisión insólita” en un pleno en el que tan sólo iba a hablarse de las nuevas medidas económicas del Gobierno central.
Así, comentó que el debate sobre el último decreto ley era una “artimaña” ante la petición de reforma de la Constitución para limitar el déficit y adjuntó que no dejó de ser una anécdota en la medida en que el PP ya propuso hace un año esa misma reforma, sin que entonces se le diera importancia desde el PSOE.
“Dijimos que se blindara ese endeudamiento público y Rubalcaba se burló entonces del PP y ahora se pasan al plagio”, afirmó y anotó que en esta ocasión el candidato socialista no dijo nada para explicar su cambio de postura.
Gutiérrez continuó afirmando que “Zapatero encajó todo un festival de golpes” y recordó que desde la bancada popular se le dijo al presidente que ésta era una medida impuesta desde la UE y el Banco Central Europeo.
El diputado del PP también reseñó que el presidente del Gobierno “amenazó” con otro pleno extraordinario la próxima semana con el fin de presentar nuevas medidas económicas para el país, como por ejemplo la ampliación de la prestación por desempleo.
Junto a ello, comentó que la reforma deberá presentarse formalmente mañana viernes pues de lo contrario no habrá tiempo para llevarla adelante en la medida en que el período de sesiones del Parlamento finaliza el próximo 26 de septiembre.
“Todo es desconcertante e informal”, afirmó y lamentó que el presidente del Gobierno no informara sobre si estas medidas que se están tomando proceden de la Unión Europea.
Un aspecto que no pasó por alto el diputado es el contexto en el que se están tomando todas estas medidas, pues afirmó que se hacen “para ayudar a Rubalcaba pues en el fondo se está haciendo campaña”.
Por último, avanzó que sin esa reforma constitucional será improbable que puedan llevarse a efecto las medidas pactadas en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera. Así, recordó que a partir de ahora, las autonomías deberán apretarse más aún el cinturón, aspecto que podría afectar a los presupuestos que en estos momentos están en cauce de realización. “Lo cierto es que no sabemos si habrá tiempo para aplicar las medidas del Consejo de Política Fiscal”, afirmó y señaló que Zapatero no se dio cuenta de que no tenía tiempo para ponerlas en práctica antes del 26 de septiembre, fecha de disolución de las Cámaras.