El Melilla Sport Capital consiguió su primera victoria de la temporada a domicilio en su visita al Tizona Universidad de Burgos, rival directo (88-90). El equipo de Alejandro Alcoba maravilló en la primera parte, cuando llegó a asumir una renta de 19 puntos, pero dilapidó su ventaja en el segundo tiempo y sufrió para mantener el resultado. El conjunto castellanoleonés llegó a colocarse a dos a falta de nueve segundos. Fue, en todo caso, un triunfo revitalizante para el cuadro norteafricano después de casi un mes de parón.
Melilla se sintió muy cómodo en una primera mitad abierta y de elevado ritmo anotador. Un parcial de 2-9 propició que el Decano asumiese sus primeras ventajas (5-9 tras mate de Tew, min. 4).
El primer cuarto solo tuvo un nombre, el de Andris Misters. Los trece puntos del exterior letón (3/4 en triples y 16 de valoración) catapultaron a los pupilos de Alcoba en el marcador, que colocaron su máxima en el minuto ocho (17-25). La velocidad en la circulación de balón permitió al equipo visitante encontrar posiciones cómodas de tiro. La conexión Marín-Uclés y el poderío de Kamba elevaron la renta al +10 (17-27, min. 9), que se mantuvo al término del primer acto gracias a una bandeja de Marín (19-29).
El conjunto melillense se divirtió sobre la pista y, poco a poco, consiguió ampliar la brecha (19-32, min. 13) hasta llegar a diferencias insospechadas. El bosnio Sikiras, en su primer duelo con la camiseta azulina, superó por completo a Rawson y dejó detalles esperanzadores. Si Misters fue el gran protagonista del primer cuarto, Kamba reclamó los focos en el segundo. Un par de 2+1 consecutivos del congoleño, el segundo a mano cambiada, ofrecieron un +16 a la escuadra norteafricana (23-39, min. 14). Tizona no encontraba la manera de detener a su rival, superior en la pintura, muy acertado desde el perímetro y dominador en el rebote ofensivo. Misters alcanzó los 20 puntos en apenas quince minutos y estableció un significativo +19 (27-46, min. 15). La inexistente defensa del bloque burgalés facilitó la labor de Melilla, que se fue al descanso con catorce puntos de ventaja (37-51).
El Decano parecía tener el triunfo en el bolsillo, pero nada más lejos de la realidad. Los pupilos de Alcoba cuajaron un pésimo tercer cuarto, faltos de energía y acusando, quizá, un exceso de relajación. El equipo fresco, dinámico, valiente y atrevido del primer tiempo dejó paso a un conjunto perezoso, desacertado y poco intenso. El cuadro visitante logró mantener su renta en el arranque del tercer cuarto (44-59, min. 25), pero un espectacular 14-4 de parcial acercó a Tizona a solo cinco puntos (58-63, min. 27). El entrenador melillense, visiblemente enfadado, se vio obligado a parar el partido. Una ligera reacción dejó al Sport Capital con ocho puntos de ventaja para afrontar el último asalto (60-68). Un triple de Reaves volvió a reducir la brecha (65-70, min. 32), pero Misters, desaparecido en la segunda mitad, contestó al tirador norteamericano desde el 6,75 y devolvió el +10 (65-75). El trabajo en la pintura de Uclés y Sikiras resultó fundamental para cortar la sangría. Una penetración de Wintering (70-81, min. 35) puso tierra de por medio en el luminoso y pareció dejar sentenciada la cita. Fue otro espejismo. Úriz y Galarreta se echaron al Tizona a la espalda y, a 35 segundos del final, pusieron al cuadro burgalés a tres (85-88). Javi Marín acertó después desde el tiro libre, pero un triple forzadísimo de Joseph colocó a los locales a dos (88-90). Después de que Kamba errase dos veces desde el 4,60, Iván Martínez erró en la última jugada del encuentro y Melilla se llevó una sufrida victoria de El Plantío.