El PSOE ha dado al traste con las aspiraciones de Melilla y Ceuta de obtener un marco de ventajas fiscales que ayudase a las ciudades autónomas a reactivar su economía. En medio de la crisis y asfixiadas por las acciones emprendidas por Marruecos para estrangular las economías de las ciudades autónomas, tanto CpM (a través de Compromís) como el PP elevaron al Congreso de los Diputados una serie de enmiendas que buscaban ayudar a reflotar el tejido empresarial de las ciudades, pero que se han encontrado con la oposición del grupo socialista. Un rechazo que se produjo a pesar de que el PSOE conforma con CpM el Gobierno de Melilla, impulsor de algunas de peticiones, tal y como fueron presentadas por las consejeras de Hacienda de Melilla y Ceuta, Dunia Almansouri (CpM) y Kissy Chadiramandi (PP) respectivamente, en el Foro Económico de El Faro
Por una parte, el PSOE rechazó las propuestas que presentó el PP como enmiendas a los Presupuestos Generales de 2022, entre las que se encontraba una la subida al 60% de las bonificaciones para los impuestos estatales. Esta medida es coincidente con la planteada por la consejera Almansouri, quien propuso la necesidad de que los nuevos impuestos estatales lleven incorporada la bonificación de al menos el 50%.
La medida afectaría a los impuestos de sucesiones, sociedades, actos jurídicos o los recogidos en la Ley de regulación del Juego. También se demandaba la ampliación del número de sociedades que se puedan acoger a las bonificaciones del impuesto de Sociedades a través de la flexibilización de las condiciones.
Por otra parte, el PSOE rechazó también las propuestas que su compañero en el Gobierno local, CpM, llevó a través de la Compromis para incluir en los Presupuestos Generales del Estado.
Entre las peticiones que se hacían desde Melilla figuraba la bonificación de mercancías para que fuese de un 100% al igual que en Canarias y no de un 75% como la tiene Melilla o la que contemplaba la posibilidad de declarar a Melilla una Zona Económica Especial. Estas medida también se quedaron en el cajón tras el rechazo del PSOE.
Ahora comprendo por qué Gloria Rojas iba tras el presidente rogándole que la atendiera… Pobre, no le hizo el menor caso … en nada.
Como demostraría ahora Gloria Rojas y su ejecutiva su talante dimitiendo ¡ Ah ! perdón que me acordaba que en la política española que ese verbo no existe para ellos.