El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, comparece este miércoles en el pleno del Congreso de los Diputados para informar sobre la tragedia del pasado 24 de junio entre Nador (Marruecos) y Melilla, donde murieron al menos 23 inmigrantes al intentar cruzar la valla de la ciudad autónoma. Tres meses después del suceso en el que participaron cerca de 2.000 inmigrantes, de los que 133 lograron cruzar la valla y, según las ONG, 37 fallecieron, además de resultar heridas unas 300 personas entre migrantes y agentes, Marlaska acude a la Cámara baja para dar explicaciones de la gestión del Ejecutivo de esta tragedia y de la actuación de las fuerzas de seguridad. Varios grupos, entre ellos EH Bildu y ERC, habían pedido la comparecencia en el pleno del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pero finalmente el PSOE ha acordado que sea el titular de Interior quien dé las explicaciones y los socios de investidura han retirado la solicitud de que lo hiciera Sánchez. Desde un principio, el Gobierno ha lamentado las muertes de los migrantes al intentar atravesar la frontera, si bien las palabras de Sánchez en un primer momento de que el intento masivo de cruzar la valla había sido "bien resuelto" por la Gendarmería marroquí enfureció a todo el arco parlamentario. El presidente admitió después que las pronunció "antes de conocer la tragedia de muertos de Nador". En el punto de mira está desde el comienzo la actuación de las Fuerzas de Seguridad. Los grupos han pedido que se faciliten y se difundan las imágenes de vídeovigilancia de la frontera melillense así como el atestado policial, pero aún no se conocen. Cinco días después de la tragedia, Marlaska aseguró en una sesión de control al Gobierno que había sido un "ataque violento" de 2.500 inmigrantesorganizados y provistos de medios "peligrosos" e incidió en que ningún Estado puede permitir ataques violentos a sus fronteras ni tampoco la agresión a sus fuerzas de seguridad. Defendió además el cumplimiento "escrupuloso de la ley" por parte de los agentes, argumento que el ministro del Interior esboza siempre que es preguntado por la actuación policial de ese día para evitar el salto a la valla. "Se actuó atendiendo a los parámetros legales nacionales e internacionales en materia de protección de derechos y libertades fundamentales con la proporcionalidad de adecuación a la situación", remarcó en julio tras inaugurar unos cursos de verano en San Lorenzo de El Escorial (Madrid).