Una convocatoria anónima por redes sociales animaba a los padres de los alumnos a manifestarse ayer a las puertas de los colegios para exigir una educación de calidad y protestar por la matriculación de niños que no están empadronados en Melilla. No hubo esas concentraciones, aunque algunos padres, por ejemplo en La Salle, se quedaron unos minutos más de la hora de entrada de sus hijos para ver qué pasaba. El Faro pudo hablar con un grupo de madres que quiso manifestar su descontento con la actuación de la Dirección Provincial de Educación de la ciudad. “Es injusto que matriculen a esos niños sin padrón cuando a mí me lo exigen y sin él no podría haber registrado a mi hijo en el colegio”, aseguró una de ellas.
Este grupo de madres con el que pudo charlar el periódico indicó que están enfadadas con todo el proceso que se ha seguido y con esta decisión, que afirman, va a afectar a la educación de sus hijos.
Una de ellas explicaba que sí había acudido al centro por si había alguna concentración, aunque entendía que no era el espacio para ello, ni tampoco la hora porque la mayoría de los padres trabajan fuera de casa. Indicó que no ve “lógico” que a todos los menores se les exija una serie de requisitos y a estos niños, no. Comentó que tuvo que entregar el certificado de empadronamiento, la renta, la proximidad con el centro y si tenía hermanos para que le aceptaran en este colegio, como asimismo lo hicieron el resto de familias en todos los centros de Infantil y Primaria.
Retraso en la clase
No comprende cómo todos los niños pasan por este proceso y muchos acaban en un colegio que no quieren los padres y los escolares que se incorporaron en esta semana entran del tirón.
Otro de los temores de esta madre es que los pequeños que se incorporen a las clases no sepan castellano o no hayan dado nunca clases. Afirmó que o bien rebajan el nivel de todos los alumnos o bien este niño nuevo acaba aislado porque no hay recursos en las aulas para darle clases particulares y que pueda avanzar como el resto.
Esta madre entendería que hubiera una clase para estos niños o un centro donde aprendan el idioma y avancen.
Pero también indicó que si ella no cuenta con la residencia en un país, la echan.
Cumplir con requisitos
Otra madre expresó que si no tuviera toda la documentación en regla le caería una multa o tendría que marcharse si fuera un país extranjero. Se pregunta que si a estos niños no le exigen el padrón, tampoco deberían con el resto.
Asimismo, se pregunta dónde van a meter a tantos niños si en la clase de su hijo ya hay 35.
Y en el caso particular de La Salle, afirmó que hay muchas familias que no han podido entrar en este centro y ahora, en cambio, llegan estos niños nuevos. Indicó que han esperado varias semanas para ver las listas de escolarización y estos pequeños van a ir directos a los colegios. Esta madre se pregunta si les corresponde o no este centro y cómo va a afectar a las clases su llegada, si bajará el nivel de todos los compañeros.
Alternativas
Subrayó que la alternativa que ve es que pasen primero por un curso de adaptación y cuando estén al día, que se incorporen a las clases. De hecho, planteó por qué las aulas de la Casa de la Juventud no se quedan para estos niños y los escolares que están allí que se repartan en centros educativos.
También plantea otra madre de un alumno si no se podrían habilitar los colegios para estos niños en horario de tarde hasta que estén al día con las materias y el idioma. Lamentó la situación de estos pequeños, pero subrayó que no puede ser a consta de empeorar la situación educativa de su hijo.
Otro tema de debate entre los padres es si los niños que se incorporan con nueva escolarización están al día de las vacunaciones. Les preocupa que los nuevos alumnos no tengan completada la cartilla respecto al resto.
La Fampa pide prudencia a la hora de abordar las escolarizaciones
La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Melilla (Fampa) hizo ayer una llamada a la prudencia a todos los agentes sociales, políticos y ciudadanos a la hora de hablar sobre la escolarización de niños que no tienen el certificado de empadronamiento. Ayer tenían una reunión por la tarde y hoy emitirán una nota de prensa con su opinión sobre este asunto. No obstante, el presidente de la entidad, José Luis Villena, indicó que lo primordial es que se pida primero información para luego poder opinar sobre el tema.
En este sentido, subrayó que hay muchas personas que han mezclado los datos de niños que se escolarizan por primera vez en Melilla, con otro grupo de menores que no cuentan con el empadronamiento y con otro colectivo de escolares que se han cambiado de centro educativo por una petición de los padres para reagrupar a los hermanos, entre otras cuestiones.
Por ello, insistió en que hay que tener prudencia a la hora de abordar este asunto y también contar con la información correcta.
En cuanto a la indignación provocada por la incorporación de tantos alumnos por parte de varios sectores, Villena aseveró que las ratios de alumnos por aula llevan siendo “ilegales” desde hace años, es decir, que hay más alumnos de lo que marca la ley.