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Afirman que la actitud “chulesca” del consejero les lleva a preguntarse por qué sigue en el Gobierno
Los Verdes e Intercultura acusan al consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, de “arruinar la imagen de Melilla en todo el Estado” con la forma en la que se está afrontando el problema de los menores extranjeros que están en la calle y también por los que están en centros de acogida.
“La actitud chulesca, ofensiva, incompetente y oprobiosa de Ventura, insultando a todo el que lo critica e incumpliendo sus obligaciones con los menores, hacen que nos preguntemos qué aporta este personaje al Gobierno de la Ciudad”, indicaron.
Los Verdes manifestaron que estas semanas Melilla está sufriendo el desprestigio “por la actitud incapaz, inepta, ignorante, torpe, inútil, ineficaz y negligente de un personaje que jamás hubiera debido ocupar un cargo que obliga, como mínimo, a tener capacitación, ternura y delicadeza con los niños desvalidos”.
El presidente de este partido, Toni Roderic, lamentó que Ventura haya anunciado que va poner varias denuncias contra personas que han criticado su actuación política. “Esperamos que pague él de su bolsillo esas reclamaciones y no con nuestro dinero”, añadió.
Asimismo, se preguntó cómo el consejero de Bienestar Social se permite desautorizar a la ONU, al Defensor del Pueblo y a todos los partidos políticos de la ciudad, además de organizaciones no gubernamentales que trabajan con este colectivo.
Autopsia del menor fallecido
Por su parte, la presidenta de Intercultura, Yonaida Selam, señaló que aún está esperando la autopsia de Sufian, el niño que falleció después de perder un pie al ser atropellado por un camión. Afirmó que Ventura “parece no tener ninguna prisa en presentar esos documentos, escondiéndose tras la otra autopsia del joven fallecido en el Baluarte”.
Selam aseveró que los menores tuteados por la Ciudad “no pueden continuar bajo la responsabilidad de un personaje como Ventura”. La activista echó en cara al consejero que tenga en cuenta los intereses de las empresas adjudicatarias de los servicios de los centros de acogida y de estos trabajadores por encima de los de los menores.
Por último, se preguntó si la Fiscalía de Melilla no tiene nada que decir sobre todo “este culebrón”, en relación al problema de los menores.