El presidente de Unitaxi Melilla, Mohamed Lamrani, ha solicitado a la Ciudad Autónoma que lleve a cabo el reglamento que fue publicado en el Boletín Oficial de Melilla (BOME) el pasado día 3 de marzo. En este sentido, además de querer saber quién es el técnico que está gestionando su aplicación, ha propuesto que sea la Consejería de Seguridad Ciudadana la que se encargue de ello, como sucede en la península, porque, según dice, este departamento cuenta con la Policía Local y dispone de “los medios y los mecanismos” para hacer que se cumpla.
Lamrani se ha expresado de esta manera después de que hayan surgido algunas críticas acerca de la escasez de vehículos que quedaron el miércoles, durante el Aid el Kebir, como servicios mínimos.
“¿Quién ha aprobado el reglamento? ¿No lo han aprobado ellos? Pues que lo pongan en práctica. ¿O es que quieren que lo hagamos nosotros?”, se ha preguntado el presidente de Unitaxi Melilla.
Lamrani ha insistido en que, aunque sí que hubo unos servicios mínimos –que no ha sabido cuantificar-, él no puede hacer nada al respecto, porque además hay taxistas –unos 15 de 60- que no solamente no forman parte de su asociación, sino que no están en ninguna otra, ya que no están obligados a pertenecer a ninguna por el mero hecho de poseer una licencia.
Sin embargo, Lamrani ha insistido en que es la Ciudad Autónoma la competente para establecer los servicios y proponer las sanciones mediante la Policía Local, como se explica en el artículo 97 del reglamento, sobre competencias: "La Ciudad Autónoma de Melilla, como órgano competente para el otorgamiento de las licencias y autorizaciones a que hace referencia este Reglamento, ejercerá la potestad sancionadora y la de revocación de dichas licencias y autorizaciones en relación a los servicios de su competencia". Unas sanciones, por otra parte, que pueden ser de 270 euros, 1.380 euros y 2.760 euros, en función de si son leves, graves o muy graves.
Rotura de la línea de la parada de la Plaza de España
Otro problema que hubo el jueves, además de la supuesta poca cantidad de taxis, fue, según Lamrani, que la línea del teléfono de la parada de la Plaza de España se ha roto durante las obras y, a la espera de sacarle un duplicado, los taxistas están teniendo que desviar las llamadas a un teléfono móvil, porque, según cuenta, “Telefónica no quiere arreglarla”, tal como ya sucedió anteriormente en la calle Ejército Español.
En su opinión, estos problemas podrían solucionarse si, como también se indica en el reglamento, se instala, por fin, radio taxi. Existe un plazo de dos años, pero, según Lamrani, tras el cambio de vehículos a híbridos o eléctricos, los taxistas necesitan la ayuda de la Ciudad Autónoma para llevarlo a cabo.
“Desde Unitaxi, pedimos un servicio y un control del taxi como se hace en Málaga, Almería, Madrid o cualquier otra ciudad española. Lo que no puede ser es que hayamos comprado los coches nuevos y no tengamos radio taxi ni nada”, ha recalcado Lamrani, quien ha concluido con la esperanza de que el nuevo Gobierno del Partido Popular (PP) les ayude con su implantación.
Al respecto, el presidente de Unitaxi ha recordado que el Gobierno ya aprobó hace unos días un Real Decreto-ley en el Consejo de Ministros en el que poco menos que venía a considerar al taxi como "un servicio esencial, igual que el del autobús", a pesar de lo cual, ha reiterado, "ningún técnico quiere hacerse cargo del reglamento y nadie quiere saber nada".
Todos los melillenses sabemos el mal servicio que prestan los taxistas en esta ciudad, muy al contrario que en otras ciudades, ya que aquí además de sucios y viejos, no respetan las normas de tráfico ni son fiables. Aunque, por supuesto, hay alguna excepción. Autobuses y VTC les obligarían a mejorar.