“Cuando todo el mundo está ya en la cama, me doy una vuelta y limpio las velas, ajusto la intensidad de las luces y me aseguro de que todo esté en su lugar. Odio levantarme por la mañana y encontrarme tazas, platos y boles sucios”. Ésta es la confesión del exfutbolista David Beckhan en un documental sobre su vida que ha suscitado el interés por entender esta patología. Para ello, El Faro conversa con la médico psiquiatra Carmen Mellado para que nos hable de cuál es el problema.
-El exfutbolista, cuando llega la noche y todos duermen en su mansión, se dedica a ordenar y limpiar la casa. Doctora Mellado, ¿qué tienen de chocante estas declaraciones del exfutbolista?
-David Beckham ha dado a conocer que padece TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo), que es uno de los siete trastornos psquiátricos más discapacitantes. Son unas confesiones muy llamativas y que no pasan inadverstidas a nadie dado que, a altas horas de la noche, no es momento para limpiar. Esos rituales obsesivos de limpieza ayudan al futbolista a sentirse mejor y estar más tranquilo.
-Lo tiene que hacer “a la fuerza”, es un impulso más fuerte que él...
-El exfutbolista no podría quedarse dormido si no siente que todo está en orden. El ordenar y limpiar le ayuda a serenarse ese día y poder irse a la cama tranquilo. Pero ese comportamiento se repetirá cada vez que él sienta el malestar por lo que al día siguiente volverá a hacer lo mismo. Estamos indicando que hay una obsesión, ese afán de orden ya no es normal.
-Esa vida ya no es tan normal...
-Los rituales obsesivos son muy invalidantes para quien los padece. Al jugador le gustaría que esos pensamientos de angustia por no tener todo ordenado no aparecieran en su mente, pero no puede evitarlo y, como desea calmarse, se siente obligado a hacer esas actividades, aunque sea por la noche, con tal de sentirse sereno. Como usted ha señadado, normal no es, no son parámetros normales de comportamiento.
-En la serie se puede ver cómo el exfutbolista necesita que su vestidor esté ordenado por colores, tonos o tamaños. Las camisetas han de estar dobladas en un modo. Doctora Mellado no me cabe duda de que el personal de servicio de la mansión de los Beckham tendrá mucho trabajo.
-Ese comportamiento no es un “ser ordenado” sin más, dado que el orden, es sabido, facilita la vida. Cuando la perfección es una obsesión ya deja de facilitártela para limitártela. Estos pacientes necesitan ayuda terapéutica y de fármacos para asumir poco a poco que su bienestar emocional no depende de un plato sucio o de un pantalón sin planchar.
-“Todo tiene que estar perfectamente ordenado, en línea recta y por parelas”. Doctora Mellado, está diciendo claramente que esta obsesión maniacal por el orden cercena la personalidad de quien la padece.
-Yo he visto manos sangrantes por tantas veces que se han lavado. Tener un trastorno de ese tipo es agotador para quien lo sufre porque pasa horas y horas ordenando debido a la obsesión por el orden doméstico. Los mismo para el que tiene obsesión por lavarse las manos cien veces al día o quien no puede ir solo por la calle, el tener miedo a atropellar ancianos o de hacer daño a los hijos. Trastornos hay de muchos tipos.
-El mismo exfutbolista lo explica así: “Es agotador andar limpiando cada vela. Recorto la cera de la vela, limpio el vidrio... Esta es mi manía favorita. Lo sé, es raro”. Es agotador por mucho que le relaje el ritual. Según usted, ¿qué habría debajo de esos comportamientos tan obsesivos y extraños?
-Una angustia vital, un malestar, enfermedades de la psique. En cuanto al origen del trastorno no se conoce la causa fisiológica, pero son casi siempre problemas sociales familiares o de convivencia.
-Hablando de convivencia... Los que conviven con estos enfermos también lo deben de pasar mal pues todos los miembros de la familia (el matrimonio tiene cuatro hijos) han de respetar las manías del padre. Tienen tres neveras, una para la comida, otra para las bebidas y otra para las ensaladas, comenta en el documental la esposa del exfutbolista.
-Efectivamente y, además, no cabe duda de que el resto de los miembros de la familia se tiene que adaptar y aceptar las manías de quien padece los trastornos. No queda otra que convivir con ello, aunque fácil no debe de ser. Son trastornos de ansiedad, el trastorno no es la actividad en sí, es decir, limpiar, sino por la relación del paciente con la actividad: pensamientos compulsivos e intrusivos y la repetición de la actividad, el ritual. A todos nos encantan los ambientes ordenados y límpios, pero quien padece TOC va más allá, pues se trata de un desajuste de unas conductas que, en principio, son normales.
-El exfutbolista ha sido valiente al reconocer el trastorno, porque las estadísticas señalan que, quien padecen estos trastornos, lo llevan en silencio. ¿Usted piensa que podrá superar estos comportamientos compulsivos?
-Puede curarse. Estos pacientes pueden reordenar la conducta descolocada que provoca el trastorno que es invalidante e impide llevar una vida normal comprometiendo seriamente la vida social.
El diagnóstico temprano es lo mejor para curarse, pues con medicación y terapia puede tratarse. Como casi todas las enfermdades mentales, están rodeadas de un cierto tabú y los pacientes no reconocen abiertamente sus obsesiones a los demás.
-Doctora Mellado, en su larga trayectoria profesional (hace poco cumplió 50 años de profesión en Milán) habrá visto muchos tipos de manías..
-Puede afectar a todo tipo de actividades pero hay unas más recurrentes que otras, casi siempre tienen que ver con limpieza o el orden extremo. Pero en mi carrera he visto personas con miedo a salir a la calle solas, con miedo al sexo, miedo a dañar a los hijos, obsesionados por la higiene etc... cincuenta años dan para mucho. Aconsejaría a todos los que están leyendo esta entrevista a no silenciar los problemas de la mente, porque si el problema se diagnostica prematuramente tiene más fácil la sanación. Los problemas de la mente no son un tabú.
