Los equipos rivales del Melilla BC refuerzan sus banquillos de cara al inicio a la Liga, que será en octubre.
Los equipos de la LEB Oro mueven sus plantillas de cara al inicio a la nueva temporada, salvo el Melilla Baloncesto el resto de equipos han incorporado a jugadores en sus clubes.
Planasa Navarra continúa dando forma al proyecto de la temporada 2015/2016. Tras las renovaciones del escolta Joaquín Bonhome y el ala-pívot Iván García, ahora es el turno de otro de los jugadores clave de la pasada campaña: Miki Servera.
Servera -Palma de Mallorca, 14/07/1992 (23 años), 1.99 metros- prolonga su contrato por un año, por lo que cumplirá su segunda temporada en Pamplona. En su primera campaña como jugador de Planasa Navarra disputó los 30 encuentros jugados por el equipo, promediando 25 minutos, 9.4 puntos y 9.5 de valoración por partido.
Estos números nos hablan de un jugador importante. Si bien llegó al Anaitasuna para desempeñar el papel de escolta, las circunstancias le llevaron al puesto de base, lugar al que supo adaptarse a la perfección demostrando una gran polivalencia y una indudable capacidad para dirigir el juego del equipo.
Miki Servera es el quinto nombre confirmado de la plantilla de Planasa Navarra para el nuevo curso. Su continuidad se suma a las de Iñaki Narros, Joaquín Bonhome e Iván García y a la incorporación de Óliver Arteaga.
El ala-pívot lituano Rolandas Jakstas y el Club han llegado a un acuerdo para la renovación del contrato y ambas partes jugarán la próxima LEB Oro.
Jakstas (2.00m y 23 años en septiembre), una de las perlas del baloncesto lituano e intenacional con todas las categorias interiores de su país, llegó la pasada temporada a un Cáceres Patrimonio de la Humanidad que tenía marcado a fuego el objetivo del ascenso como una apuesta en el juego interior. Alternando las posiciones de cuatro y cinco su temporada fue buena (en poco más de 20 minutos por partido promedió 9,3 puntos, 4,8 rebotes y 1 asistencia para una valoración de 10,2). Jugador muy trabajador, intenso, fuerte y muy dotado de técnica individual, seguirá creciendo y adaptándose al baloncesto español un peldaño más arriba para, en principio, ocupar posiciones de ala-pívot, su habitat natural. Su enorme potencial le augura un buen futuro y repetir en Cáceres debe constituir un gran paso en esa dirección.