Nordin Aiachi Benaisa es “padre soltero” de tres hijos de entre 5 y 8 años. Durante varios días ha vivido con el miedo de que le iban a desahuciar de su casa, pero finalmente ha conseguido una ayuda de emergencia de Servicios Sociales que le permitirá estar en esta vivienda más tiempo. Sin embargo, su desesperación no acaba aquí. “Llevo cinco años en paro y necesito un trabajo para mantener a mis hijos”, aseguró a El Faro.
Su desasosiego le ha llevado a publicar en su perfil de Facebook que precisa de un empleo. Ya está cansado de ir de un lado a otro solicitando un trabajo porque no surte efecto.
Nordin no quiere depender de las ayudas, pero en estos últimos cinco años no ha tenido suerte. Aseguró que su mujer les “abandonó” hace ese mismo número de años y se ha dedicado en cuerpo y alma a cuidar de sus pequeños.
Una mala racha
En el 2012 ya se quedó sin empleo y sin poder pagar el alquiler de la casa en la que residía la familia. Fue entonces cuando entró en una vivienda de protección oficial (VPO) que estaba vacía. Durante dos años fue el hogar de sus hijos, pero les denunciaron y aunque intentó llegar a un acuerdo para abonar los alquileres atrasados de este inmueble, les desahuciaron.
Los cuatro acabaron en un hotel y tras una búsqueda intensiva, logró encontrar una casa tres meses más tarde. Servicios Sociales le echaba una mano con los gastos de alquiler y otras facturas.
De hecho, hasta el mes pasado cobraba el IMI. Pero la ayuda se agotó. No tenía dinero para afrontar el abono del alquiler de este mes. No obstante, Servicios Sociales ha encontrado la forma de echarle de nuevo una mano a través de una ONG.
Nordin afirmó que los melillenses se han volcado con él en las redes sociales. Le han ofrecido dinero y comida. Sin embargo, lo ha rechazado. Necesita con urgencia un trabajo para mantener a su familia. Con la nueva aportación de la Ciudad tiene cubierta la alimentación de los niños, aunque reconoce que ha aceptado algo de ropa porque los niños crecen rápido y no tiene suficientes recursos para comprarles camisetas o zapatos.
Este melillense indicó que ha trabajado en todos los sectores, desde la hostelería hasta la construcción, así como repartidor de dulces.
La paternidad le hizo superar los errores del pasado
De la misma forma que Nordin recibió ayer mensajes de ánimo a través de las redes sociales, también contó con otros en los que le recordaban que estuvo en el Centro Penitenciario. Aseguró que fue hace muchos años, más de seis, cuando acabó en estas dependencias por errores del pasado, por los que ya fue condenado y pagó por ellos. Su paso por este centro le hizo cambiar. Afirmó que más tarde conoció a su mujer, se casó y tuvo a sus tres hijos que le han ayudado a superar todo lo vivido. También le acusan de tener dos coches. Destacó que no es así, pues están en el desguace, aunque no los haya dado de baja.
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