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El arma fue hallada en la antigua fábrica de ladrillos gracias a la llamada de un ciudadano anónimo
La Policía Nacional de Melilla recuperó en la noche del pasado viernes la escopeta que le fue sustraída de un vehículo el 25 de septiembre en el barrio de La Cañada. El robo se produjo cuando los agentes se desplazaron a dicha zona para actuar en el supuesto robo de un ciclomotor, que había denunciado un vecino.
Los agentes encontraron el arma gracias a la colaboración ciudadana. Sobre las 22:00 horas del viernes, la sala del 091 recibió una llamada anónima, que apuntaba que en la antigua fábrica de ladrillos ubicada en la carretera de Farhana parecía que había un arma tirada.
Agentes de la Policía Judicial se desplazaron al lugar indicado para rastrear la zona. Tras realizar una búsqueda, los funcionarios localizaron la escopeta envuelta en trapos.
La sustracción del arma se produjo el pasado 25 de septiembre cuando una unidad policial fue requerida en el barrio de La Cañada tras la denuncia de un ciudadano al que supuestamente habían sustraído su moto.
Una vez allí, los agentes fueron atacados con “piedras” y “objetos contundentes”. Los profesionales del Cuerpo Nacional tuvieron que buscar refugio y solicitar refuerzos.
Esta circunstancia fue aprovechada por los atacantes para robar del interior del vehículo una escopeta y otros objetos.
Hasta el momento no hay detenidos por estos hechos. La operación policial para encontrar a los autores de la agresión a los agentes y los daños al vehículo policial continúa abierta.
Dos redadas
El pasado 29 de septiembre siete furgones de la Policía Nacional se desplazaron a La Cañada para llevar a cabo un dispositivo de prevención de la delincuencia. Durante la redada no se halló la escopeta en cuestión. Únicamente pudieron recuperar el prolongador de un equipo de transmisiones que fue robado del coche policial el mismo día que el arma.
Además, incautaron 15 dosis de hachís. También se encontraron un chaleco antibalas, unos grilletes, una camisa de manga corta, un forro polar, un anorak, una chaqueta y una mochila con “material policial diverso”. El material fue hallado “en zonas descampadas” y habría sido sustraído de un furgón de la Unidad de Intervención Policial (UIP) en 2014.
Un día más tarde, el 30 de septiembre, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo un segundo dispositivo de prevención de la delincuencia y contra el menudeo de estupefacientes en la zona del parque de La Cañada y en diversas calles de este barrio.
Entre los objetivos de estas intervenciones estaba buscar la escopeta que fue robada del vehículo de este Cuerpo, pero, una vez más, no lograron encontrarla.
No obstante, se identificó a 36 personas y fueron registrados 16 vehículos, procediéndose a la incautación de dos bolsas de kifi y unos 100 cigarrillos de esta sustancia. Asimismo, los funcionarios se incautaron de objetos contundentes como navajas, un palo de 70 centímetros de longitud y una llave de corte de luz. Aparte de las armas blancas intervenidas, la Policía encontró asimismo un destornillador, un cúter y una llave para cortar el suministro eléctrico, entre otros objetos. Según un comunicado del Cuerpo, la llave, que tiene forma de escuadra, puede ser la sustraída a dos trabajadores de una compañía eléctrica que fueron asaltados en ese barrio en febrero de 2013.